Mientras los grandes festivales ecológicos como el BioFach alemán acaban de superar la barrera psicológica de los 25 años, BioCultura llega este año a los 30, y eso dice mucho de todo el camino recorrido contra viento y marea por Vida Sana.
Carlos Fresneda, corresponsal de El Mundo en USA y Reino Unido y periodista ávido de una gran r(e)volución a favor de la ecología y la justicia social, nos escribe y nos explica cómo ha seguido BioCultura en los últimos años desde la distancia y, por otro lado, nos narra cómo se sigue el éxito de BioCultura desde otros países y sus medios del sector.…Este artículo aparecerá en un monográfico de The Ecologist, el de otoño, dedicado a conmemorar los 30 años de BioCultura Madrid.
Mientras los grandes festivales ecológicos como el BioFach alemán acaban de superar la barrera psicológica de los 25 años, BioCultura llega este año a los 30, y eso dice mucho de todo el camino recorrido contra viento y marea por Vida Sana. Los Bioneers norteamericanos celebran por cierto también este otoño los 25 años: desde el otro lado del Atlántico nos llegan las felicitaciones a esta otra iniciativa pionera en el Mediterráneo, que marcó el camino al Terra Madre de Slow Food y a toda la eclosión de festivales en la última década.
La web norteamericana Treehugger se percató hace ya ocho años de la labor de BioCultura y se refirió a ella “como la feria ecológica más importante en España y posiblemente del Mediterráneo y en Europa”: http://www.treehugger.com/culture/xiii-biocultura-eco-fair-in-barcelona.html.
Algo que ya destacaba Treehugger, y que sorprende a otros medios extranjeros, es el volumen de expositores y sobre todo de visitantes de BioCultura (más de 70.000 en Madrid, más de 60.000 en Barcelona), muy por encima de la media europea y también de los populares Green Festivals norteamericanos. La extensión de la feria a Valencia y más recientemente a Bilbao ha despertado también un creciente interés de las empresas internacionales, aleccionadas por el ascenso del sector “bio” en España en tiempos de crisis económica.
En Gran Bretaña, y después de una tendencia a la baja durante cuatro años, el mercado ecológico acaba de repuntar. Este mismo año ha debutado además la feria de la agricultura urbana, The Edible Garden Show, con la presencia del príncipe Carlos, infatigable defensor (además de empresario) de los productos biológicos.
España ha estado siempre en el ojo de mira de la Gran Bretaña ecológica, que se nutre precisamente de gran parte de nuestra producción. Desde fuera sorprende cómo, siendo el gran productor europeo de agricultura ecológica, vamos aún tan retrasados a nivel de consumo. Pero las distancias se acortan, y la labor de Vida Sana y BioCultura tienen mucho que ver con el reciente “boom” de la agricultura y con el tirón de ecohéroes locales como Mariano Bueno o innovaciones “made in Barcelona” como el Leopoldo City Vegetable Garden, visitantes asiduos de BioCultura.
El eco de BioCultura, a través de Gusto Latino y webs similares http://gustolatinogastronomia.com/2013/04/26/productos-latinos-en-la-feria-de-la-biocultura-barcelona/, ha llegado también a Sudamérica, donde hay un creciente interés por el intercambio de productos e iniciativas relacionados con la comida sana en España, y donde existen también festivales que tienden un puente entre las prácticas tradicionales y la agricultura orgánica, del Buenos Aires Market al Feria Eco de Valparaíso.
BioCultura está pues bien acompañada en esta revolución silenciosa que sembró sus semillas hace 30 años y que en pleno siglo XXI está recogiendo la inmejorable cosecha. Hay otra manera de comer y vivir: lo que hace tres décadas parecía una utopía es hoy una realidad tan palpable y comestible como esta nueva edición, la más internacional, de BioCultura. ¡Salud!