Cataluña se une a California para dar luz verde a dos proyectos, cuya dirección científica será liderada por el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF) acerca de cómo el cambio climático tiene efectos sobre las bioregiones que se encuentran dentro de un clima mediterráneo, además de compartir información para prevenir incendios forestales en dichas zonas.
Ambas iniciativas se acaban de presentar en el marco de la celebración del segundo encuentro anual de la Asociación Mediterránea de Acción por el Clima (MCAP), celebrado en el Cabo Occidental (Sudáfrica) y se espera que las primeras conclusiones de ambos proyectos se puedan conocer en la COP30, en Brasil.
Estas dos iniciativas medioambientales se engloban en la MCAP, la alianza entre regiones con clima mediterráneo de todo el mundo para hacer frente conjuntamente a retos ambientales. Forman parte territorios como Emilia-Romaña (Italia), Occitania y la Región Sur (Francia), Grecia Central, Biobío y Santiago (Chile), Baja California Sur (México), Marruecos Oriental, Rabat-Salé-Kenitra y Tánger-Tetuán-Alhucemas (Marruecos), Australia Meridional, Victoria y Nueva Gales del Sur (Australia), California (EE. UU.) y el Cabo Occidental (Sudáfrica).
Dos proyectos, entre Cataluña y California, sobre biodiversidad e incendios forestales en bioregiones mediterráneas
Cataluña pone en marcha dos proyectos internacionales para hacer frente a los impactos del cambio climático en las bioregiones con clima mediterráneo. El CREAF asumirá la dirección científica de ambos proyectos, que se han presentado esta semana durante el segundo encuentro anual de la Asociación Mediterránea de Acción por el Clima (MCAP), celebrado en el Cabo Occidental (Sudáfrica). Se espera que los primeros resultados se presenten en la COP30, en Brasil.
El primer proyecto, co-liderado por Cataluña y California, estudiará los impactos del cambio climático sobre la biodiversidad en regiones con clima mediterráneo. Analizará fenómenos como el desplazamiento de especies, cambios fenológicos, alteraciones hidrológicas o modificaciones en las relaciones ecológicas. También participan instituciones científicas de ambas regiones impulsoras, como la Universidad de California, Berkeley.
El segundo proyecto se centra en la prevención de grandes incendios forestales mediante la creación de un sistema de información compartido. Este sistema incluirá cartografía de riesgos, planificación de la reducción de combustible, uso de quemas controladas y herramientas para la predicción y mitigación del riesgo. En este caso, los socios principales son Cataluña, California, el Cabo Occidental (Sudáfrica) y Nueva Gales del Sur (Australia).
Ambos proyectos se desarrollan en el marco del MCAP, una alianza entre regiones con clima mediterráneo de todo el mundo para hacer frente conjuntamente a retos ambientales. Forman parte territorios como Emilia-Romaña (Italia), Occitania y la Región Sur (Francia), Grecia Central, Biobío y Santiago (Chile), Baja California Sur (México), Marruecos Oriental, Rabat-Salé-Kenitra y Tánger-Tetuán-Alhucemas (Marruecos), Australia Meridional, Victoria y Nueva Gales del Sur (Australia), California (EE. UU.) y el Cabo Occidental (Sudáfrica).
“El CREAF liderará la parte científica de ambos proyectos, aportando conocimiento ecológico y coordinación entre equipos de investigación internacionales”, explica Alicia Pérez-Porro, jefa de Relaciones Institucionales e Interacción Política del centro. “Es una oportunidad que coincide con una nueva manera de trabajar dentro del propio CREAF, donde nuestra ciencia no solo aporta conocimiento útil para las políticas públicas, sino que lo hace al servicio y bajo la dirección de los gobiernos de toda una bioregión”.
Por su parte, Marc Vilahur, director general de Políticas Ambientales y Medio Natural, afirma que “queremos saber qué tendencias son comunes y cómo podemos prevenirlas o paliarlas mejor. Esto nos permitirá dar respuestas más efectivas a los fenómenos climáticos extremos”. Sobre los incendios, destaca que “la conservación de la biodiversidad y la prevención no solo son compatibles, sino que pueden ser sinérgicas. Este proyecto ayudará a avanzar hacia una gestión integrada en territorios especialmente vulnerables a los grandes incendios forestales”.
Los proyectos reciben una financiación inicial de 72.000 € aportados por el Departamento de Unión Europea y Acción Exterior, mientras que el resto de la inversión la asume el Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica. EFE / ECOticias.com




















