La COP 23 arrancó el pasado 6 de noviembre con el principal objetivo de incrementar la ambición conjunta de los países para hacer frente al cambio climático y dar una respuesta efectiva al Acuerdo de París, esperando avanzar en el programa de trabajo que permita proceder a la aplicación del mismo y que, en todo caso, se tendrá que adoptar el próximo año, en la COP 24 de Katowice (Polonia).
España, representada por la Ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), participará en la Cumbre del Clima de Bonn y lo hará avalada por una reducción de los gases de efecto invernadero cifrada el pasado año en un 3,5% respecto al 2015.
En este sentido, cabe recordar que el Gobierno de España destinó 595 millones de euros en 2016 a financiación climática y que el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética se encuentra en proceso de elaboración tras cerrarse el período de consulta pública, habiéndose recibido durante el mismo más de 300 aportaciones de todos los sectores sociales: desde particulares hasta empresas, sindicatos, asociaciones empresariales, administraciones públicas, organizaciones no gubernamentales, agrupaciones de la sociedad y representantes de la academia.
EL ACUERDO DE PARÍS, MARCO DE REFERENCIA
La COP 23 arrancó el pasado 6 de noviembre con el principal objetivo de incrementar la ambición conjunta de los países para hacer frente al cambio climático y dar una respuesta efectiva al Acuerdo de París, esperando avanzar en el programa de trabajo que permita proceder a la aplicación del mismo y que, en todo caso, se tendrá que adoptar el próximo año, en la COP 24 de Katowice (Polonia).
En el marco de esta conferencia, que se extenderá hasta el próximo día 17, y que aglutina a representantes de 200 Estados, se pretende aumentar la acción climática conforme al marco establecido por el Acuerdo de París y fomentar nuevas iniciativas, además de ampliar las existentes, para lograr una mejor coordinación de los esfuerzos invertidos.
De hecho, uno de los resultados esperados es cerrar el diseño y modalidades del Diálogo Facilitador (Diálogo de Talanoa) de 2018, que la Unión Europea considera esencial para lograr una puesta en común de todos los países sobre los esfuerzos colectivos en materia de mitigación y la brecha a los 2ºC antes del primer ciclo de ambición previsto para 2023. El Acuerdo de París pretende precisamente limitar el aumento de la temperatura media del planeta a menos de 2ºC, procurando que no aumente más de 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales.
También se espera llegar a puntos de encuentro sobre Fiyi (caber recordar que la COP 23 está presidida por el Primer Ministro de Fiyi, Frank Bainimarana) sobre la vulnerabilidad de los estados y poblaciones que reciben los impactos del cambio climático, como es el caso de un Plan de Acción de Género, la puesta en marcha de la Plataforma creada en París para las comunidades indígenas e incluir el vínculo entre la salud de los océanos y el cambio climático, recordando al respecto que el MAPAMA trabaja para logar que en 2020 la superficie marina protegida de España alcance el 10%, aumentando dos puntos respecto al 8% actual.
Más de un centenar de eventos están contemplados en esta Cumbre, previendo la activa participación de la delegación española en las sesiones de negociación y en encuentros ya tradicionales tales como el almuerzo ministerial de la Red Iberoamericana de Oficinas de Cambio Climático o la Iniciativa 4 por 1000, respaldada por España desde la COP 21 de París.