La cantidad de lluvia que se registró en 48 horas y la condición arcillosa del terreno facilitaron la formación de las lagunas. Pero la llegada, un poco tardía, de la época seca terminaron por evaporarlas.
Luego de un mes de convertirse en la principal atracción del Parque Nacional Volcán Irazú, las 3 lagunas y una pequeña cascada que se formaron luego del paso del huracán Otto, desaparecieron por completo.
La cantidad de lluvia que se registró en 48 horas y la condición arcillosa del terreno facilitaron la formación de las lagunas. Pero la llegada, un poco tardía, de la época seca terminaron por evaporarlas.
La laguna ubicada en el cráter conocido como Playa Hermosa tenía un metro de profundidad y la del cráter nombrado “Diego de la Haya” era un poco más grande. Además, había una ubicada en una zona a la que los turistas no pueden acceder.
“La última laguna desapareció la semana pasada. Es un proceso normal porque el terreno no es totalmente impermeable y sí hay filtración. Después de que pasó el huracán, se alejó la época lluviosa y empezaron los días soleados que provocaron que se evaporaran”, aseguró Henry Villalta, funcionario del Parque Nacional Volcán Irazú.
Las lagunas se convirtieron en un atractivo extra para los visitantes durante el fin de año. Incluso, muchos turistas viajaron a la zona sólo para conocer las lagunas.
“Tuvimos varios frentes fríos y aún así los turistas, principalmente costarricenses, venían preguntando por las lagunas. A nosotros nos parece curioso, porque no es algo tan raro sino que ya ha ocurrido en otras ocasiones”, añadió
Si no pudo ver las lagunas, no se preocupe: en algunas ocasiones se forman durante la época lluviosa. Por lo que, con un poco de suerte, podrán verse de nuevo en octubre o noviembre.