Dicha investigación evidencia que los tiburones y rayas, así como el camarón, tienen una vulnerabilidad de moderada a muy alta a la pesca de arrastre.
Un estudio realizado por el Centro de Investigación de Ciencias del Mar y Limnologia (Cimar) de la Universidad de Costa Rica (UCR), revela que la pesca de arrastre pone en riesgo la sobrevivencia de tiburones y rayas en aguas costarricenses.
Dicha investigación evidencia que los tiburones y rayas, así como el camarón, tienen una vulnerabilidad de moderada a muy alta a la pesca de arrastre.
Incluso indican que las especies más vulnerables son el tiburón martillo Sphyrna lewini, la raya Hypanus longus y el tiburón de aguas profundas Echinorhinus cookei.
De acuerdo Mario Espinoza, uno de los autores del estudio, más del 25% de todos los tiburones y rayas que habitan las aguas del país son capturados por la pesca de arrastre, principalmente por su gran tamaño, poca mobilidad y lento crecimiento de sus poblaciones.
“A pesar de que este grupo es capturado de forma incidental, representa un porcentaje muy alto de la diversidad de depredadores marinos en nuestra costa Pacífica,” indicó.
Además agregó que esta situación es preocupante, ya estas especies son sumamente vulnerables a la pesca de arrastre.
El estudio tambien encontró que las concentraciones más grandes de estos animales vulnerables a la pesca de arrastre se dan en el Pacífico Sur, específicamente desde Manuel Antonio hasta Golfo Dulce, entre los 50 y 100 metros de profundidad.
“Esta información complementa estudios previos del Cimar, que identificaron al Golfo de Nicoya, Térraba-Sierpe y Golfo Dulce como zonas de cría y alimentación de tiburones y rayas que deberían estar protegidos de esta pesquería”, aseguró la investigadora, Tayler Clarke.
Los investigadores insisten en la necesidad de prohibir o regular esta pesquería también le ayudaría al país a cumplir con sus obligaciones adquiridas con la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites).
Para Ingo Wehrtmann, director del Cimar, “estos resultados son de suma importancia, considerando la actual discusión sobre la eventual apertura de nuevas licencias por parte del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca) para la pesca de arrastre en Costa Rica”.
El estudio de los autores Tayler M. Clarke, Mario Espinoza, Raquel Romero Chaves e Ingo S. Wehrtmann fue publicado en la revista Biological Conservation.