Árboles que cuentan la historia hídrica del río Amazonas. Las variaciones climáticas naturales, la deforestación y el cambio climático antropogénico son los factores que contribuyen a que el río Amazonas experimente estos eventos extremos.
Una nueva investigación de la Universidad de Arizona indica que es posible que las recientes inundaciones y sequías en la cuenca del río Amazonas aún no hayan excedido el rango de variabilidad hidro climática natural.
Árboles que cuentan la historia hídrica del río Amazonas
Utilizando el análisis de los anillos de los árboles fueron capaces de reconstruir las precipitaciones totales en el este del Amazonas. También cotejaron los relatos documentales históricos de inundaciones extremas en Manaos y Santarem.
Basándose en estos datos, Granato-Souza y Stahle encontraron evidencia que indica que las inundaciones del río Amazonas en 1859 y 1892 pueden haber igualado o superado las riadas más recientes.
Sin embargo, la mayor diferencia que hay entre lo que sucedió hace más de un siglo y ahora es el tamaño de la población que ahora vive en la llanura aluvial. “Hay millones de personas que residen en Manaos».
«De hecho, es la ciudad más poblada del norte de Brasil. Por lo que existe una preocupación en estas regiones directamente vinculada a las posibles consecuencias socioeconómicas de este tipo de eventos”. Esto lo señaló Granato-Souza.
“Por lo general, las personas más pobres son las que habitan en las zonas con mayor riesgo. Por ello son los más vulnerables y los que sufren las consecuencias de las inundaciones. Hay un nivel ‘normal’ máximo previsto para el río. Pero las inundaciones más extremas superan ese umbral y los estudios han demostrado que la cantidad de eventos se está intensificando”.

Analizando el pasado y previendo el futuro
Granato-Souza añadió que examinar la escala de inundaciones pasadas proporciona un marco para imaginar y anticipar las consecuencias ambientales y socioeconómicas de futuras situaciones similares. Ya que, probablemente serían devastadores para las personas que viven en zonas de alto riesgo.
Las colecciones de anillos de árboles utilizadas en esta investigación provienen del río Paru. Este es un afluente del Amazonas, cercano al área donde recientemente se han descubierto los árboles más altos en la Amazonía brasileña. Las descripciones de los árboles gigantes en la remota y virgen cuenca del río Paru han cautivado el interés público en Brasil y en el extranjero.
Stahle y Granato-Souza están trabajando con científicos ambientales en Brasil, incluidos Diego da Silva del Instituto Federal de Amapa, Robson Borges de la Universidad Estatal de Amapa y Eric Gorgens de la Universidad Federal de los Valles de Jequitinhonha y Mucuri.
Su objetivo es ayudar a encontrar respuestas a las interrogantes más significativas relacionadas con estos árboles. Como la edad, su tasa de crecimiento, el historial de perturbaciones y la sensibilidad climática de estas duras maderas tropicales. Árboles que cuentan la historia hídrica del río Amazonas.
Referencia: artículo titulado «Extremos de sequía e inundaciones en el río Amazonas y en el noreste». Sus autores fueron Daniela Granato-Souza, estudiante de posdoctorado en geociencias. Y David Stahle, profesor distinguido de geociencias. La Sociedad Meteorológica Estadounidense publicó estos hallazgos recientes de este estudio en la revista Journal of Climate.