Una ayuda histórica y hasta ahora antes vista, un total de 700 millones, es lo que ha decidido destinar el Gobierno de Pedro Sánchez para poner en marcha sistemas para almacenar energía en España. Esta ayuda viene de los fondos Feder y servirán para sufragar unas instalaciones que deberán estar en marcha en cuatro años.
Estas ayudas, que se conocieron en marzo en la Cumbre energética del Miteco, permitirán cofinanciar hasta el 85% de la inversión en instalaciones de almacenamiento energético. La idea con la puesta en marcha de estos sistemas es incidir en la «flexibilidad, resiliencia y robustez del sistema eléctrico nacional» como argumentan fuentes del ejecutivo nacional.
Un paso más en la integración, cada vez mayor, de fuentes de energías limpias, al mismo tiempo que se apuesta por ir reduciendo la dependencia actual de los combustibles fósiles.
El Gobierno moviliza la mayor ayuda para sistemas de almacenamiento de energía en España
El Ministerio para la Transición Ecológica lanzará este mismo mes la convocatoria de ayudas, histórica hasta el momento, para costear diversos sistemas de almacenamiento de energía a gran escala, una vez se ha dado luz verde por parte de la Comisión Europea. La línea de subvenciones, con un total de 700 millones de euros, será gestionada a través del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE).
Estas ayudas, que fueron anunciadas al sector el pasado mes de marzo durante la primera Cumbre energética del Miteco, permitirán cofinanciar hasta el 85% de la inversión en instalaciones de almacenamiento energético, tanto en formato independiente (stand-alone) como hibridadas con plantas de generación renovable, incluyendo también soluciones térmicas. «El objetivo es reforzar la flexibilidad, resiliencia y robustez del sistema eléctrico nacional, facilitando una mayor integración de fuentes limpias y reduciendo la dependencia de combustibles fósiles», apuntan desde el Gobierno.
Según fuentes del sector, el programa permitirá apoyar entre 80 y 120 proyectos, que deberán estar funcionando antes de que acabe el 2029.
Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC)
El almacenamiento de energía es una de las tecnologías clave señaladas por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) tal y como se indicaba en la revisión hecha en septiembre de 2024. En este informe se mencionaba que su papel es «esencial para desplazar generación a momentos de mayor demanda, aportar servicios complementarios a la red eléctrica y facilitar el equilibrio del sistema ante una creciente penetración renovable».
Según explica Aleasoft, en abril, los principales mercados eléctricos europeos registraron sus precios mensuales más bajos desde al menos noviembre de 2024, situándose en la mayoría de los casos por debajo de los 80 euros/MWh. El descenso de los precios del gas, cuyos futuros alcanzaron el menor promedio mensual desde agosto de 2024, es una de las causas de este descenso.
A esto hay que añadir el incremento de la producción fotovoltaica, que registró récords de generación para un mes de abril en Alemania, España, Italia y Francia. Además, la demanda eléctrica y los precios del CO2 bajaron. En cambio, la producción eólica disminuyó. Los futuros de Brent alcanzaron el promedio mensual más bajo desde mayo de 2021.