El batacazo que sufrió el RDL antiapagones en el Congreso de los Diputados no desmoraliza a Sara Aegesen Ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien asegura que siguen trabajando para sacar adelante este proyecto.
Aparentemente, la ley que no salió adelante por los votos en contra de varias agrupaciones políticas, contenía una serie de modificaciones que podrían haber significado inversiones importantes y que ahora están en riesgo de perderse.
Freno a la inversión en renovables
El rechazo este martes en el Congreso del conocido como decreto ‘antiapagones’, el paquete de medidas urgentes que el Ejecutivo aprobó en junio con el fin de fortalecer el sistema eléctrico, pone en riesgo hasta 200.000 millones de euros en inversiones en renovables, 250 millones en descuentos en la factura eléctrica para la gran industria y frena la implantación del autoconsumo en España.
«Son buenas medidas, son medidas necesarias y hoy quiero apelar a su responsabilidad», defendió la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, antes de la votación. Pero no convenció ni a parte de los socios de investidura, ni a la oposición.
Pese a contar con el visto bueno de ecologistas, asociaciones de renovables y de las empresas eléctricas, hasta siete partidos (PP, Vox, Podemos, Junts, BNG, UPN y el diputado de Chunta integrado en Sumar) decidieron votar en contra de la norma, alegando que «no es la solución».
«El Gobierno quería darle ayudas a determinadas eléctricas, todas ellas renovables, y nosotros no podemos participar de un engaño masivo como el que se pretendía», ha asegurado el secretario general del PP, Miguel Tellado, este miércoles en una entrevista en Las Mañanas de RNE. «Ni impone sanciones al oligopolio eléctrico (…) ni obligaciones para que algo así no se vuelva a producir», criticó a su vez la secretaria general de Podemos, Ione Belarra.
Hacen falta muchos cambios
La semana pasada, la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (Aelec) —que integra a Iberdrola, Endesa y EDP, y patronales de las energías limpias— alertaba de las «graves consecuencias» que podría tener la no ratificación del texto. Entre otras, aludía a la exposición a futuras crisis como el apagón del 28 de abril, «pérdida de competitividad internacional y paralización de inversiones esenciales para reducir la dependencia energética exterior».
También un informe de PwC advertía del impacto en las inversiones si la norma no salía adelante. Sobre todo, por el «cuello de botella» que tiene el sector eléctrico con las conexiones a la red para grandes consumidores: la red está tan saturada que en 2024 sólo se aceptaron una de cada diez solicitudes.
«La saturación de la red impide la electrificación de sectores estratégicos, desde la industria pesada hasta el hidrógeno renovable, además de ralentizar proyectos alineados con los objetivos climáticos. Por otra parte, la falta de capacidad de red puede desincentivar inversiones, limitar la competitividad territorial y generar desigualdades entre regiones con acceso y aquellas con nudos saturados», alerta la consultora.
El sector calcula que hay unos 20.000 megavatios (MW)de renovables pendientes de dicha autorización, lo que arroja una pérdida potencial de inversiones cercana a los 200.000 millones de euros (a razón de diez millones de euros por MW).
En el caso de las renovables, con el rechazo a la norma también se queda sin efecto la flexibilidad en los plazos que el Gobierno había introducido para que los promotores de parques renovables cumplieran los tiempos fijados por la ley antes de perder sus inversiones. En este caso, según el director general de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), José Donoso, hasta 30.000 millones de euros en inversiones se caen «inmediatamente», ha asegurado.
¿Qué pasará con la exención de peajes a la industria electrointensiva?
Para seguir potenciando la demanda y la electrificación industrial, el texto también incorporaba la exención del 80% de los peajes eléctricos (un componente fijo de su factura) a la industria electrointensiva, aquella que necesita mucha electricidad en su proceso productivo como siderúrgicas, químicas, productoras de gases industriales o metalúrgicas.
La medida proporcionaba una ayuda de 250 millones de euros para reducir sus costes energéticos y tenía previsto aplicarse con carácter retroactivo desde el pasado 23 de enero, «habida cuenta de la eficacia que ha demostrado desde su establecimiento, hace dos años y medio, con motivo de la guerra de Ucrania», explicó Aagesen durante su presentación.
A su vez, también decae la subvención de 2 millones de euros para minimizar el impacto ambiental de la gestión de purines de porcino en Cataluña.
Freno al autoconsumo basado en energías renovables
Y respecto a la línea de medidas de electrificación, al objeto de fomentarlas renovables en el autoconsumo, el Real Decreto-ley contemplaba ampliar de dos a cinco kilómetros la distancia máxima entre la generación y el consumo para instalaciones menores de cinco MW.
«Resulta incomprensible», denuncia en un comunicado la Fundación Renovables, «la posición de bloqueo de los partidos, especialmente las formaciones progresistas como Podemos y BNG, que, a tenor de su programa electoral, han defendido el autoconsumo y un modelo energético renovable más descentralizado«. Y, añade, «también es incomprensible el voto negativo del PP -una formación que se presenta a sí misma como «de Estado»-, que ha dejado en el cajón una reforma imprescindible para el futuro del país».
La norma contemplaba, además, la creación de la figura del gestor del autoconsumo, lo que a juicio de la Fundación garantizaría la existencia de una persona física o jurídica para actuar como mediador y representar los intereses de los consumidores asociados a un autoconsumo, un «reclamo histórico» de las comunidades energéticas, cooperativas y ciudadanos con tejados solares.
En la misma línea, la organización ecologista Greenpeace ha lamentado que no haya prosperado el decreto, pues consideran que contiene medidas «largamente esperadas» de aceleración de la transición energética y de impulso del autoconsumo. «La crisis climática no espera a nadie. Necesitamos un consenso político amplio», ha lamentado la organización en una nota remitida a los medios, para después exigir que se presente una nueva propuesta «lo antes posible».
Aagesen:»gran irresponsabilidad» el ‘no’ del Congreso
La onda expansiva del ‘no’ del Congreso a la norma ha llegado también a los mercados financieros. Las compañías energéticas que cotizan en el Ibex 35 han abierto en rojo este miércoles, con Solaria liderando los descensos. Otras compañías que cotizan en el mercado continuo como Ence Energía, Grenergy Renovables o Elecnor también han registrado caídas en la apertura.
Para la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, el rechazo del Congreso es una «gran irresponsabilidad» y ha recordado que el Ejecutivo va a «insistir» con la propuesta de Real Decreto-ley y que se encuentra trabajando «desde ya».
«Se nos puso mucha presión para tener un informe (sobre el apagón) lo antes posible. Lo hicimos con mucha diligencia, desde el rigor técnico (…) y lo que hemos visto es que no sólo no nos apoyan sino que no ponen ninguna medida encima de la mesa«, ha reprochado a los grupos tras la presentación de un informe sobre la situación de la mujer en ámbitos vinculados a la transición ecológica, que recoge Efe.
«Esto lo vamos a sacar adelante (…) Porque es una gran prioridad y porque nos jugamos muchas cosas», ha afirmado el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, confiando en que «a través del diálogo» se logre finalmente el respaldo necesario en la Cámara Baja, al considerar que el contenido del decreto es «muy positivo y muy necesario» tanto para la sociedad como para las familias y empresas.
Recordó que la ley contaba con la aprobación de diversos sectores, la de los ecologistas y la de varios partidos políticos, por lo que se espera que, ya que es tan necesaria, la ministra no parará hasta conseguir resultados positivos. ECOticias.com