Sabemos que China siempre va un paso por adelante, pero detrás de sus grandes logros también se esconden grandes misterios como el que veremos a continuación, pues tiene unas curiosas esferas que podrían revolucionar la industria energética.
China guarda sus secretos en enormes esferas
Las energías renovables han llegado a nuestras vidas, demostrando que podemos tener electricidad sin dañar nuestro planeta, sin embargo, constantemente terminamos desperdiciando esta energía por no saber como almacenarla.
La energía solar no funciona en la noche, mientras que el viento tampoco es constante y en esos momentos, la red eléctrica necesita un respaldo para seguir funcionando, por lo que es de suma importancia encontrar una manera de guardar la energía sobrante de los días soleados o con mucho viento.
Durante años, la respuesta más común han sido las baterías gigantes, pero estas a menudo dependen de materiales costosos como el litio y su capacidad es limitada, por lo que sigue sin ser una opción viable, sin embargo, ahora la situación podría ser diferente.
En búsqueda de soluciones China parece haber encontrado la respuesta, pues está trabajando un sistema de almacenamiento de energía que utiliza unas esferas misteriosas, que tienen todo el potencial necesario para revolucionar el mundo energético.
La solución china para las energías renovables
Si te sorprendieron las burbujas negras de la vida, prepárate porque China esconde un secreto dentro de unas esferas, las cuales se esconden bajo tierra, pero ¿Qué contienen? Bueno aunque suene extraño, estas esferas son minas de sal abandonadas en la provincia de Hubei.
El Grupo Huaneng ha convertido estos gigantescos espacios subterráneos en una enorme «batería de aire», un sistema conocido como Almacenamiento de Energía de Aire Comprimido (CAES) y tiene una capacidad de almacenamiento de 300 MW/1500 MWh.
Su funcionamiento es realmente sencillo, pues, cuando hay exceso de electricidad, se usa para comprimir aire y guardarlo en estas cavernas. Cuando se necesita energía, se libera ese aire a presión, que hace girar una turbina y genera electricidad.
A pesar de su gran tamaño, el sistema es sorprendentemente eficiente. Su eficiencia de «ida y vuelta» (la energía que se recupera) es del 64%, y esperan que llegue al 70% con mejoras futuras, por lo que es una alternativa competitiva a otras formas de almacenamiento de energía.
China siempre un paso por delante
Como China siempre piensa en todo, para mejorar aún más esta tecnología, se hizo un proyecto de prueba en la misma zona y fue desarrollado por la Universidad de Tsinghua quien encontró la clave para que el sistema funcionara sin usar otros combustibles.
Su truco fue reutilizar el calor que se produce al comprimir el aire, logrando una eficiencia de más del 60% y lo más importante con cero emisiones, convirtiendo al proyecto en un gran aporte para nuestro planeta.
También se incorporaron inventos totalmente hechos en China, como compresores muy potentes y turbinas enormes, pero lo que más llama la atención es que puede arrancar y empezar a funcionar en solo cinco minutos, con solo un clic.
Una nueva forma de almacenar energía
Este proyecto nos demuestra cómo la colaboración entre empresas, universidades y el gobierno puede lograr objetivos ambiciosos y por supuesto, posiciona a China como un gran líder de las energías renovables y su almacenamiento.
El almacenamiento es clave para acelerar la transición energética y estas ‘baterías de aire’ podrían ser un modelo a seguir, pues demuestran el potencial del aire comprimido para almacenar energías renovables y que estas no se desperdicien.
Con este proyecto China ha descubierto que la clave para tener un suministro de energía constante está en el aire y nos demuestra que el almacenamiento de energía es la clave para sacarle el máximo provecho a las energías verdes, de hecho, en España también hacen falta estos sistemas pues todos los días se pierde mucha energía verde.