España ha logrado la creación de edificios futuristas. Infraestructuras capaces de imitar a la naturaleza que realizan la fotosíntesis. Con el paso del tiempo, se ha generado una transformación considerable desde lo que fueron las construcciones tradicionales de hormigón hasta los diseños actuales, más compasivos con el medioambiente. Ahora se recurre a la construcción sostenible, edificios verdes y tecnologías y construcción tecnológica. Las nuevas prácticas, más limpias y eficientes, son el nuevo estandarte de la construcción.
España lleva al epítome los edificios futuristas
Tras conocerse la existencia de edificios verdes presentes en España, ha salido a la luz nueva apuesta que lleva al país a lo más alto de la construcción sostenible. La verdadera ciudad del futuro, que pone por delante la sostenibilidad, no se encuentra China, aunque eso podría pensarse en primera instancia.
Está ubicada en Benidorm. La provincia de Alicante destaca por sus calas de aguas tranquilas y pueblos blancos como Altea. Aunque, a partir de ahora, tiene un nuevo atractivo en Benidorm. Tras años viéndose como un destino de vacaciones de lujo, Benidorm está comenzando a verse como un laboratorio urbano de sostenibilidad.
Está siendo capaz de crear su propia energía, reutilizando casi toda el agua que consume y convirtiéndose en un ejemplo para otras ciudades, que también buscan sobrevivir a la crisis climática. El sistema BIPV (integración fotovoltaica en edificios) no es una idea nueva.
Sin embargo, la intervención de la compañía Solar Earth va más lejos de lo que nadie ha logrado. La firma emitió un comunicado explicando cómo rehabilitará los dos edificios residenciales de 17 plantas, Club Médico VI y VII.
Lo que está pasando en España tiene al mundo en shock
Logrará los cambios estipulados con la integración de 1200 m2 de vidrio fotovoltaico vertical integrado en fachada ventilada. Al margen de la parte estética, estas fachadas tendrán la función de piel energética. Originarán alrededor de 190 000 kWh al año.
Cifra que permitirá acotar al 35% la demanda energética de las viviendas y evitar la difusión de más de 50 toneladas de CO2 anuales. El sistema de fachada ventilada, además, brinda aislamiento térmico y acústico. De esta manera, afianza el confort de los vecinos.
En la obra, se dispone del apoyo del Ministerio de Vivienda y la Generalitat Valenciana. Sumado a esto, cuenta con una financiación de 1,9 millones de euros del Plan Next Generation EU. Por su parte, Benidorm ya llevaba años trabajando en otro importante recurso: el agua.
El Ayuntamiento ha ido informando sobre el camino a seguir en términos hídricos. Renovar lo obsoleto, fortificar las infraestructuras y utilizar la digitalización para controlar consumos y fugas. Este año, ha agregado el Plan Director de Agua Regenerada. Un programa con el que esperar un ahorro del 15% de agua potable.
España planea un fuerte cambio en el sector de la construcción
Su apuesta por el vidrio solar y la reutilización del agua se encuadra en una amplia estrategia de sostenibilidad urbana. El Plan Benidorm Visión 360, dentro de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destino, contempla iniciativas como corredores climáticos, sistemas de drenaje urbano sostenible y medición de huella hídrica.
También existen prácticas óptimas en cuanto a eficiencia energética, como la renovación del alumbrado público con tecnología LED y planes de movilidad sostenible. Todas estas acciones han derivado en que Benidorm obtuviera el reconocimiento de “Pionero Verde” dentro de la red de Destinos Turísticos Inteligentes.
Benidorm se ha visto como símbolo de turismo de masas y especulación urbanística durante años. Bajo este marco, la ciudad se ha concentrado en la óptima gestión de recursos. Primero con el agua y ahora con la energía. Aunque se habla mucho sobre los avances que llegan desde Asia. Esta vez, la ciudad del futuro se está gestando en España. Una proeza que se suma a la primera pintura fotovoltaica que España desveló ante el mundo.