Hace tiempo que vemos inventos alternativos a los paneles solares, pero lo que se propone con este invento que funciona con hidrógeno es inédito. La energía solar es una de las más fuertes del mundo, especialmente ahora que se buscan activamente nuevas formas de energía para sustituir el uso de los combustibles fósiles. Es una energía poderosa y estudiada, además de una protagonista vital en la transición energética que atravesamos.
La característica más importante de la energía solar es que protege el planeta del cambio climático. Al recoger y aprovechar los rayos del sol, reduce el uso de los combustibles fósiles, descartando las emisiones de gases de efecto invernadero. Para aprovecharla se utilizan paneles solares, unos dispositivos ampliamente conocidos en todo el mundo.
Sin embargo, ahora parecen estar quedando de lado con la llegada de un invento que funciona con hidrógeno. Este último se posiciona como un factor clave en la transición energética y la descarbonización de la economía.
Los paneles solares son historia con el nuevo invento de hidrógeno
En pleno traspaso energético, aparecen unas baterías de hidrógeno para el hogar. 1.500 kW que aportan electricidad a una vivienda durante meses. Home Power Solutions ha presentado su nueva generación de baterías de hidrógeno verde para almacenar energía en el hogar. Adquieren el nombre de Picea 2 y disponen de una capacidad muy alta de 1,5 MWh, además de un 70% menos de peso y un tamaño también inferior.
Hasta ahora, la industria de los sistemas de almacenamiento de energías para viviendas ha estado dominado por las baterías residenciales de litio, aunque también han tenido una gran llegada las de sodio y otras tecnologías minoritarias. Lo que no resulta tan cotidiano es la oferta de baterías de hidrógeno para otorgar suministro a las viviendas. No obstante, Home Power Solutions AG (HPS) lleva años haciendo esta gestión y el año pasado presentó la última renovación de la gama Picea, una línea más adaptada a las necesidades actuales.
Las baterías Picea 2 fueron desarrolladas en el centro de investigación de la firma en Berlín. Doblaron su potencia de salida para cumplir con las elevadas demandas de los vehículos eléctricos y las bombas de calor. A estas características se le suma una capacidad de 1.500 kWh, que representa una capacidad 100 veces superior a la que encontraríamos en una batería residencial tradicional.
Esto permitiría un suministro ininterrumpido de electricidad a un hogar que consume 15 kWh diarios durante tres meses. Así se pueden aprovechar al máximo los excedentes de energía solar producidos durante el verano, contando durante el invierno con electricidad ‘gratuita’ todo el tiempo.
Este nuevo invento de hidrógeno jubila a los paneles solares
El módulo central del nuevo sistema Picea 2, sin incluir los depósitos de almacenamiento de hidrógeno, ocupa un espacio reducido de poco más de 1,5 metros cuadrados, lo que representa una reducción de tamaño y hasta un 70% menos de peso respecto a la versión anterior.
Este módulo incluye el sistema de tratamiento de agua y el electrolizador pertinentes para producir hidrógeno, la pila de combustible para llevar adelante el proceso de reconversión posterior en electricidad y una batería de 17 kWh para almacenar energía a corto plazo.
Además, cuenta con un inversor híbrido y una unidad de ventilación con recuperación de calor. Los depósitos de calor se disponen en la zona exterior del domicilio, pudiendo instalarse entre 1 y 5 en función del presupuesto y las necesidades del cliente. De manera adicional, un sistema de monitorización inteligente gestiona el conjunto del dispositivo y la energía.
En definitiva, este invento que funciona con hidrógeno podría ser el fin para los paneles solares. Un escenario que se encrudece cada vez más ante la llegada de las esferas fotónicas.