El investigador admite que estos hoyos ya estaban cartografiados pero en la campaña de 2018 se ha podido mejorar el detalle al multiplicar la resolución a 10 o 15 metros.
Investigadores españoles del Instituto Español de Oceanografía (IEO) completarán entre abril y julio la investigación marina del Canal de Menorca (al sur de Mallorca) y de Cap Bretón (en el Cantábrico) para completar el conocimiento de hábitats marinos españoles de especial importancia, en el marco del proyecto LIFE IP Intemares que desarrolla la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica.
El objetivo, según ha explicado a Europa Press el jefe de campaña de Cabo Tiñoso en el IEO, Miguel Fernández, es conocer de manera exhaustiva, con estudios concretos tanto la geología como la fauna del hábitat y combinar este conocimiento con imágenes muy precisas para hacer un «estudio más detallado» a través de tres campañas.
Así, ha señalado que en el marco del proyecto LIFE IP INTEMARES uno de los hábitat señalados fue el de Cabo Tiñoso (Murcia). Allí, durante la primera campaña se realizó la caracterización geológica y se aprovecharon las muestras que había de sedimentos, pero también se estudió la parte de fauna asociada a estos sedimentos. Con los datos obtenidos, el investigador espera poder «poner a punto» el muestreo que se realizará en las próximas campañas.
Por ejemplo, en Cabo Tiñoso y Cabo de Palos el IEO ha podido prospectar «todo» lo que estaba previsto, es decir las zonas conocidas como Seco de Palos y los Cañones Submarinos y una «tercera zona» que es el denominado «sector cuatro», una zona en la que se han descubierto escapes de fluidos desde el fondo que crean una especie de «hoyos de viruela», conocidos en el argot científico como ‘pockmarcks’. Se trata de pequeños agujeros por los que sale rápidamente fluido, gas o agua del fondo marino y genera un hueco.
En realidad, el investigador admite que estos hoyos ya estaban cartografiados pero en la campaña de 2018 se ha podido mejorar el detalle al multiplicar la resolución a 10 o 15 metros. «Queremos ese detalle para buscar estructuras de arrecifes coralinos, acumulación de esponjas, etcétera, para mejorar la cartografía y localizar los detalles posteriormente con mayor facilidad», ha señalado.
Alto valor ecológico
La campaña, que se realizó entre el 25 de enero y el 12 de febrero de 2018 en puntos de Murcia y Alicante permitió, con 13 personas a bordo del buque Ángeles Alvariño, hallar hábitats de «alto valor ecológico» que podrían dar lugar en el futuro a la declaración de una nueva Red Natura 2000. Fernández ha explicado que en la misma línea se investigará el hábitat del Canal de Mallorca, entre el 29 de abril y el 9 de mayo, y en Cap Bretón, entre el 26 de junio y el 10 de julio. La idea, según destaca es conocer las áreas marinas españolas.
«El Proyecto LIFE IP Intemares es muy amplio e incluye diferentes acciones, unas pensadas para reprocesar los datos obtenidos en el Proyecto LIFE INDEMARES (anterior) y que permitieron declarar varios Lugares de Interés Comunitario y otras para investigar tres zonas nuevas, aunque no se analizarán toda la superficie marina española», ha precisado. El investigador recuerda que en campañas anteriores de proyectos LIFE de la Comisión Europea y que en España cuentan con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica, se analizaron áreas como el cañón de Avilés o el Banco de Galicia, entre otros hábitat.
En definitiva, subraya que la suma de INDEMARES con INTEMARES da un «porcentaje bastante amplio de conocimiento de las aguas y hábitat marinos de España que, de hecho es el país europeo con más zonas estudiadas y más áreas marinas protegidas», lo que está permitiendo un conocimiento «representativo» del ecosistema marino español. Por ejemplo, ha añadido que entre los últimos hallazgos tras estudiar Cabo Tiñoso, en Murcia, Fernández ha indicado que con datos preliminares se han encontrado varios tipos de corales y esponjas en el marco del estudio faunístico.
Por su parte, el director del proyecto LIFE IP Intemares y subdirector de la Fundación Biodiversidad, Ignacio Torres, ha explicado a Europa Press que el proyecto nació con el reto de gestionar los ocho millones de hectáreas que constituyen la Red Natura 2000 marina española y completar los trabajos y avances llevados a cabo en el marco del proyecto LIFE+ INDEMARES, que logró dar un gran paso en materia de declaración de nuevos espacios y puso las bases para su gestión.
Torres ha indicado también que en esta nueva etapa se unieron instituciones de referencia en el ámbito de la gestión, la investigación y la conservación del medio marino para la ejecución del LIFE IP INTEMARES y ha asegurado que el proyecto cuenta con un detallado plan estratégico que guía las distintas actuaciones.
En este contexto, el subdirector de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica ha insistido en que la declaración de nuevos espacios de la Red Natura 2000 debe estar «basada en la ciencia, a través de campañas oceanográficas rigurosas y multidisciplinares. «En el proyecto LIFE Intemares estamos llevando a cabo acciones para mejorar el conocimiento del medio marino, sus especies y hábitats», ha defendido. Finalmente, se ha comprometido a que para gestionar estos espacios protegidos seguirán «impulsando procesos participativos para implicar a todas las administraciones, los sectores socioeconómicos y la ciudadanía desde el inicio».