Día Internacional en Recuerdo del Desastre de Chernóbyl 2023. Lo que sucedió aquel 26 de abril de 1986 lo hemos contado varias veces. En especial el Día Mundial en Recuerdo del Desastre de Chernóbyl 2022. Pero de lo que nadie suele hablar es de lo que pasa ahora en las ruinas de los que antes fuera una central nuclear.
Incendios y cesio: mala combinación
El 28 de abril de 2015, casi 29 años después de la explosión del reactor número 4 de Chernóbil, se produjo un gran incendio forestal. Era el cuarto de gran magnitud que acontecía en la zona. Las imágenes de satélite evidenciaron que solo en esta oportunidad ardieron más de 10.000 hectáreas en los alrededores de la planta.
Según el trabajo de un equipo de investigación del Norwegian Institute for Air Research, el efecto acumulativo de los tres incendios forestales anteriores ya ha liberado entre el 2% y el 8% del cesio 137 que aún está presente en el suelo. De hecho, por esas fechas se detectaron partículas radiactivas en Kiev, a más de 150 kilómetros de distancia.
El reactor aún ‘vive’
El reactor destruido, que todavía contendría el 97% de los elementos radiactivos, sigue siendo una amenaza. El sarcófago de hormigón construido apresuradamente sobre sus ruinas se resquebrajó. Y en 2013, parte del techo se derrumbó. En 2010 comenzó la construcción de un arco metálico gigante de 92 metros de altura y 245 metros de largo destinado a cubrir el reactor.
Este faraónico proyecto, liderado por un consorcio, ha costado más de 1500 millones de euros. Como Ucrania solo podía aportar el 8%, una parte tuvo que ser financiada por el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo y el resto provino de la comunidad internacional. Por falta de fondos, su inauguración se retrasó varios años. La fecha inicial era 2015, pero fue finalmente terminada en 2019. Los ucranianos le llaman ‘El Arca’.
Esta no es en modo alguno una solución duradera. Se construyó este sarcófago de metal para que permita a los expertos iniciar el desmantelamiento de la planta. Por lo que su única finalidad oficial es confinar las proyecciones de elementos radiactivos durante una obra que debería extenderse durante varias décadas. Y que, entre la pandemia y la guerra se ha vuelto a retrasar.

Instituto Belrad
Fundado en 1990 por el profesor Vassily Nesterenko, el Instituto Belrad se considera la única organización que brinda protección radiológica efectiva a las poblaciones que viven en territorios contaminados. En particular, permite que los niños se beneficien del cuidado y la medición de la radiactividad presente en sus cuerpos. No olvidar que el gobierno ucraniano dejó de dar este servicio y de prestar atención a los cánceres por radiactividad del norte del país, hace ya muchos años.
Por otra parte, hay que recordar que no fue Ucrania la única ni la más perjudicada de las naciones. Cuando ocurrió el desastre, Chernóbil se encontraba en territorio de la U.R.S.S. Una vez que esta se disolvió, la central quedó dentro de los límites ucranianos. Pero fue Bielorrusia la nación que sufrió las peores consecuencias de este desastre. Tanto en su medio ambiente como en la salud de su población.
Stop nucleares – Día Internacional en Recuerdo del Desastre de Chernóbyl 2023
A día de hoy, 37 años después de la explosión del reactor, el desastre sigue ahí. Y allí estará por mucho tiempo más. En nombre de todas las víctimas pasadas, presentes y futuras, debemos recordar su terrible relevancia. Y hacer todo lo posible para evitar otro accidente. El primer paso sin dudas es eliminar las centrales nucleares. No más nuclear en Alemania, ¿España para cuándo? Día Internacional en Recuerdo del Desastre de Chernóbyl 2023.