Trump ha asestado un ‘golpe bajo’ a las políticas limpias de California revocando la norma que aceleraba la transición a las energías limpias prohibiendo desde 2035 la venta de coches de gasolina y promoviendo la de vehículos eléctricos.
Todo empezó a fines del mes pasado, cuando los republicanos han hecho valer su mayoría en el Senado. La iniciativa ‘tumbada’ fue presentada en 2022 por el gobernador Gavin Newsom y celebrada por ser la primera en su tipo en la lucha contra el cambio climático en el mercado automotriz más grande de los Estados Unidos.
Esta ha sido revocada tras un voto de 51-44 que ha sido considerado como un triunfo de la industria petrolera y una importante escalada en el choque entre California y la Administración de Donald Trump, que había prometido eliminar la prohibición.
La ‘estocada final’ a los coches eléctricos en California
Finalmente, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, promulgó este jueves la ley que revierte la prohibición a los vehículos de gasolina para 2035 en California, un esfuerzo que habían liderado las autoridades demócratas de ese estado para acelerar la transición hacia los coches eléctricos. «Deberían darte la opción de comprar un coche eléctrico, un coche de gasolina o uno híbrido», dijo Trump desde la Casa Blanca antes de firmar el texto.
El Congreso de Estados Unidos, de mayoría republicana, aprobó en mayo vetar esta norma de California, gobernada por el demócrata Gavin Newsom, uno de los mayores rostros de la oposición a Trump. «Querían destrozar nuestras cadenas de suministro nacionales y detener literalmente la civilización. Y mientras todos los puestos de trabajo del automóvil se irían a China», criticó el republicano.
Además, también validó el fin de otras políticas estatales destinadas a reducir las emisiones de los tubos de escape de algunos automóviles y la contaminación por óxido de nitrógeno, uno de los gases que más contribuyen a la contaminación atmosférica.
El estado de California ha sido tradicionalmente pionero en normas sobre contaminación para mejorar la calidad del aire y proteger la salud de las personas, y para la industria de los vehículos eléctricos. Con el bloqueo firmado por Trump, no solo desaprueba la norma en el país, sino que impide a otros estados, que habían planteado sumarse, hacerlo.
Esta ley supone un nuevo movimiento de la Administración de Trump, que se opone a las energías limpias, para acabar con las leyes más estrictas contra la contaminación. En este sentido, afirmó durante la firma que «los molinos de viento están matando al país y dejan los campos llenos de chatarra». Se ponen viejos, se oxidan y se ponen malos. Es la mayor estafa de la historia, la energía más cara», apuntó. EFE / ECOticias.com