Con la irrupción de los motores más grandes del mundo, podríamos despedir al diésel en los mares. La descarbonización es uno de los desafíos de la Organización Marítima Internacional (OMI). El ente de la ONU afirma que la instauración de las medidas necesarias para alcanzar las cero emisiones netas para 2050 tiene un alto costo económico. Asimismo, solicita al sector que lo asuma después de años de contaminación.
En una visita a Panamá, su secretario general, Arsenio Domínguez, enfatizó el Marco Net-Zero, que estipula normas regulatorias sobre el combustible marino y los precios de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), reporta EFE. Junto con incentivos financieros, busca animar a las empresas navieras a utilizar combustibles y tecnologías más limpias y de cero emisiones.
Los motores quemarán este combustible: ¿llega el fin del diésel en los mares?
Tras ver de lo que son capaces los motores que queman la gasolina del siglo XXI, se ha expuesto un tipo de motores que despiden al diésel en el mar. Una compañía japonesa ha completado el primer motor comercial del mundo impulsado por amoníaco, con un 90% menos de emisiones.
Japan Engine Corporation (J-ENG) ha sentado un precedente en el transporte marítimo al culminar el desarrollo del primer motor comercial a escala completa movido por amoníaco. Un progreso, alcanzado el 30 de agosto de 2025, que ha quedado inscrito en el proyecto “Desarrollo de Buques de Próxima Generación” del Green Innovation Fund.
Ha estado promocionado por la Organización para el Desarrollo de Nuevas Energías y Tecnologías Industriales (NEDO) de Japón. El modelo 7UEC50LSJA-HPSCR, con 50 cm de diámetro de cilindro, siete cilindros y sistema SCR de alta presión, es mucho más que una unidad pionera en su categoría.
También se ha validado por ClassNK, entidad líder en certificación marítima. Los experimentos se efectuaron bajo la supervisión de actores clave del sector, como NYK Line y Nihon Shipyard. Se confirmó de esta manera su rendimiento superior tanto en modo dual (amoniaco y fueloil pesado) como en un funcionamiento exclusivo con amoniaco.
Los motores del mar avanzan hacia la descarbonización
El motor se incorporará en un buque AFMGC (Ammonia-Fueled Medium Gas Carrier) que se está construyendo en los astilleros de JMU Ariake. La puesta en marcha está prevista para 2026. No se tratará de un prototipo experimental, sino un barco operativo que sentará el inicio de una nueva era para la industria naval.
El despliegue de este motor no fue un proceso improvisado. Desde 2023, J-ENG ha llevado adelante más de 1000 horas de ensayos con un motor monocilíndrico en el Centro de I+D de Mitsubishi Heavy Industries en Nagasaki.
Tomando como referencia estos datos, se creó el diseño comercial que agregó otras 700 horas de pruebas en el periodo comprendido entre abril y agosto de 2025. En este punto, puso un especial énfasis en la fiabilidad, eficiencia y sistemas de seguridad frente a posibles fugas de amoniaco.
En instancias de carga máxima y con un 95% de mezcla de amoníaco, las emisiones de óxidos nitrosos (N2O) se conservaron en torno a 3 ppm. Lo que supone una disminución de más del 90% en gases de efecto invernadero en comparación con motores tradicionales.
El amoníaco de estos motores desplaza al diésel de los mares
Los óxidos de nitrógeno (NOx) se acotaron a la mitad. Asimismo, las emisiones de amoniaco no quemado fueron prácticamente nulas debido al sistema SCR. El motor puso de manifiesto su eficiencia térmica. Fue equiparable con el fueloil. Pero ese no fue el único aspecto llamativo.
En algunos parámetros, incluso lo superó. Dato que consolida el argumento de que el amoniaco puede transformarse en un combustible viable y competitivo a nivel energético. J-ENG está trabajando en un formato aún más robusto del motor.
Reporta 60 cm de diámetro de cilindro para cubrir la demanda futura de buques de gran porte propulsados por amoniaco. Hasta ha comenzado la construcción de una nueva planta de fabricación proyectada para 2028, con apoyo financiero del Gobierno japonés mediante los Bonos de Transición Económica GX.
La planta hará posible la producción de motores de amoníaco a gran escala, combinándolos con otros modelos. El sector marítimo se acerca, con esta propuesta, hacia un futuro cargado de tecnologías limpias. Los motores más grandes del mundo quemarán esto amoniaco, precediendo al posible fin del diésel en los mares. Un fin al que también podrían contribuir estos motores titánicos que reescriben el futuro del mundo.