A la jornada han asistido el General Jefe del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Antonio Tocón, y el director general de Biodiversidad y Calidad Ambiental del MITECO
El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha detenido o investigado a 21 personas por uso ilegal de cebos envenenados en la Operación ANTITOX, según se ha informado en la jornada ‘Antitox VII‘. Avances en la lucha contra el uso ilegal de cebos envenenados en el medio natural.
Además, el SEPRONA ha señalado que en el marco de la Operación Antitox VII, durante 2018 se han realizado un total de 201 inspecciones en 21 provincias españolas, se tramitaron 18 diligencias por delitos contra la fauna silvestres y se ha detenido o investigado a 21 personas. Sin embargo, el SEPRONA lamenta que pese a los avances logrados pro administraciones públicas y ONG el envenenamiento sigue siendo aún en la actualidad una de las amenazas más graves para la conservación de la biodiversidad.
Al acto han asistido entidades involucradas en la problemática del envenenamiento de fauna silvestre, tanto administraciones públicas (comunidades autónomas, Administración General del Estado y el SEPRONA de la Guardia Civil) como organizaciones no gubernamentales. El uso ilegal de cebos envenenados provoca la muerte de cientos de animales al año y entre ellos, ejemplares de especies amenazadas como el águila imperial ibérica, el oso pardo o el milano real, y causa impactos negativos en los usos agrarios y cinegéticos por la muerte de perros. Además supone una amenaza para la salud pública.
A la jornada han asistido el General Jefe del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Antonio Tocón, y el director general de Biodiversidad y Calidad Ambiental del MITECO, Javier Cachón, que han destacado el papel de las autoridades policiales en la investigación y persecución de este delito y la necesidad de coordinar programas de acción conjuntos entre distintas administraciones públicas para optimizar los resultados de lucha contra el envenenamiento de fauna silvestre.
Como resultado del esfuerzo realizado, el SEPRONA ha constatado que la mayoría de especies depredadoras y necrófagas, que son las más susceptibles de ser afectadas por el uso ilegal de cebos envenenados incrementen sus poblaciones en los últimos 20 años en España. Especies como el águila imperial ibérica, el oso pardo, los buitres negro y leonado presentan una tendencia creciente o positiva en España. Sin embargo, el número de muertes producidas por veneno es todavía elevado y existen prácticas y usos delictivos asociados al empleo de cebos tóxicos aún frecuentes en España.
En el marco de la Operación Antitox VII, el SEPRONA durante 2018 ha logrado hallar 70 animales muertos por prácticas ilegales, siendo los más numerosos los buitres leonados y perros domésticos. En total se han hallado 25 cebos envenenados colocados en el medio natural para intoxicar voluntariamente a la fauna y se han incautado 876 efectos ilegales de captura.
El trabajo se ha desarrollado en 21 provincias españolas, donde se ha computado un total de 66 infracciones de la legislación administrativa de protección medioambiental, y se han iniciado 18 diligencias por delitos penales contra la fauna silvestre, resultando 21 personas detenidas o investigadas. Asimismo, el laboratorio de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil ha realizado análisis toxicológicos y recibió 55 peticiones de informes sobre casos de posibles envenenamientos.
Durante la jornada, otras instituciones han presentado sus avances en 2018. Así, el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC- CSIC) ha mostrado las estadísticas más relevantes de los análisis toxicológicos realizados en los últimos quince años, que evidencian un cambio tanto en los patrones de uso como un aparente descenso paulatino del número de casos de envenenamientos registrados en gran parte del territorio español.
La Junta de Andalucía ha expuesto el punto de vista autonómico en la lucha contra el envenenamiento de fauna silvestre. El programa andaluz sirve de ejemplo por el importante esfuerzo en la provisión de medios para la prevención del uso de venenos acometidos durante los últimos catorce años. Por último, las entidades conservacionistas han informado sobre los distintos proyectos de colaboración con autoridades policiales en la persecución y de seguimiento de delitos ambientales, y la coordinación que a nivel estatal ofrece el programa Antídoto.