El próximo 13 de noviembre se anunciará a los ganadores de los Comedy Wildlife Photography Awards, un concurso que premia a las imágenes que tengan la mejor «excelencia técnica», y el contenido y el título más graciosos.

Este concurso se divide en un premio general y cinco categorías: criaturas del aire, de la tierra, bajo el agua, competición juvenil y ‘portafolio’ (que reúne un conjunto de imágenes de la misma temática).

La única categoría que tiene algún tipo de restricción es la juvenil, dónde sólo pueden participar menores de 16 años: el resto están abiertas a cualquier fotógrafo aficionado o profesional que haya realizado una imagen ‘graciosa’ a un animal en los últimos diez años.

Entre los cuarenta finalistas de la edición de 2019, que la organización del evento dio a conocer en septiembre, hay fotografías como la de unas leonas bailarinas y unas nutrias que parecen saludar a la cámara. El gran premio para el ganador del certamen será un safari de una semana en Kenia.

El certamen fue creado hace cuatro años por los fotógrafos Paul Joynson-Hicks y Tom Sullam, que ejerce como director de la competición y presidente del jurado, que actualmente cuenta un total de trece miembros.

La creación del concurso tenía un doble objetivo, según cuentan Paul y Tom en la página web de los premios: convertirse en una competición «ligera, simpática» y «posiblemente poco pretenciosa» sobre animales salvajes haciendo cosas divertidas» y concienciar sobre la necesidad de cuidar el medioambiente.

El certamen promueve consejos sencillos para contribuir a ello a nivel individual, como tratar de reducir el consumo de productos no reciclables y la duración de las duchas e intentar que familia y amigos sigan ese ejemplo, entre otros.

A su vez, el certamen busca dar visibilidad a la actividad de la Fundación Nacidos Libres (Born Free), una organización sin ánimo de lucro con sede en Reino Unido que trabaja a favor de los derechos de los animales, protegiéndolos en sus hábitats naturales y trabajando en la rehabilitación de los que rescatan de «condiciones de cautiverio terribles».

Estas son algunas de las imágenes finalistas: