El agente de Medio Ambiente del Conselh Generau dAran (Lleida) detenido el miércoles por su supuesta implicación en la muerte del oso Cachou ha quedado en libertad tras acogerse a su derecho a no declarar ante los Mossos dEsquadra.
Su abogado, Enric Rubio, ha explicado que el agente mantiene su inocencia «y sostiene que no ha envenenado ni matado al oso». Al agente, según fuentes del caso, se le investiga por un presunto delito contra la fauna, otro de revelación de secretos y un tercero de prevaricación. Horas antes de que el funcionario del Conselh Generau d’Aran pasara a disposición judicial, los agentes que dirigen la investigación registraron su domicilio en Les (Lleida).
La detención se ha producido tras seis meses de investigación por parte del juzgado de Vielha, una causa que está bajo secreto de sumario. Cachou, al que se le atribuyeron varios ataques al ganado en el verano de 2019, fue localizado muerto en un bosque de Les el 9 de abril y la primera explicación del Conselh Generau d’Aran, basándose en el informe preliminar de la necropsia, fue que podría haber sido atacado por otro oso y haberse despeñado unos 40 metros de altura por un terreno abrupto.
Entidades ecologistas señalaron entonces que no era creíble ni tenía ningún fundamento técnico afirmar que Cachou se hubiera peleado con otro oso, porque el animal no presentaba heridas en la cabeza, donde se producen las principales agresiones en enfrentamientos entre osos.
También consideraron que no era posible que se hubiera caído por un fuerte desnivel de unos 40 metros porque, con su peso, los golpes le hubieran producido fracturas en las extremidades.
