Según ha explicado la consejería en un comunicado, los coraleros realizaban la pesca furtiva en una zona conocida como la punta de las Tres Corves del Parque, donde la extracción de coral rojo está especialmente prohibida y el incumplimiento supone una infracción muy grave que puede constituir un delito contra la fauna.
Los coraleros, que han sido denunciados, fueron sorprendidos cuando iban a salir del agua después de haber realizado la inmersión, y volvieron a hundirse para desprenderse del coral.
Tras una inspección subacuática, los Agentes Rurales y los vigilantes del Parque encontraron tres sacos con coral rojo y utensilios para la pesca escondidos en una cueva.
En total se decomisaron 14,5 kilos de coral en bruto que, como aun estaba vivo, fue depositado en custodia en el Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), donde se analizará y se tratará para determinar qué cantidad se podría replantar de nuevo en el medio marino.
ECOticias.com – ep