Para Ecologistas en Acción, permitir la caza en fincas públicas gestionadas por el Organismo Autónomo de Parques Nacionales es un grave paso atrás que provocará serios impactos ambientales, por ello, exige al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que anule las subastas y dedique las fincas a la conservación de la naturaleza.
La decisión del Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN) de sacar a subasta el aprovechamiento cinegético de las fincas públicas de Quintos de Mora en Toledo y de Lugar Nuevo y Contadero-Selladores en Jaén, supone, para la organización ecologista, un gravísimo paso atrás, impropio de un ente administrativo que tiene encomendadas funciones de protección de la naturaleza en los espacios más emblemáticos de España.
Permitir la caza, en particular las monterías y ganchos, en terrenos en los que desde hace más de 10 años se viene invirtiendo mucho en una gestión enfocada a la recuperación ambiental y a la protección de algunas de las especies de fauna silvestre más amenazadas de nuestro país, como son el lince ibérico, el águila imperial ibérica, la cigüeña negra y el buitre negro, es un lamentable error que además no se justifica por el control de las poblaciones de cérvidos como aduce el OAPN.
Las poblaciones de cérvidos no se controlan adecuadamente mediante monterías o ganchos, en las que se cazan sobre todo machos para trofeo. La forma adecuada de controlarlos, a falta de depredadores naturales que hagan esa función gratis, es la caza selectiva y el trampeo en vivo. Es decir, lo que se venía haciendo hasta ahora con aceptables resultados.
Se argumenta que son criterios económicos los que justifican esta decisión, aduciendo que el control de los cérvidos era caro y ahora lo harán los cazadores pagando. Pero este argumento resulta falaz por dos motivos. Primero porque el coste era muy escaso, dado que la medida se realizaba por los propios guardas de las fincas y las capturas eran vendidas a terceros, bien para carne, bien para reintroducciones. Y segundo, porque el dinero que se va a recaudar es muy escaso frente al enorme beneficio ambiental que representa disponer de grandes fincas públicas gestionadas con criterios de conservación. Además, no está garantizado que el dinero vaya a repercutir necesariamente en el presupuesto del OAPN.
Ecologistas en Acción está convencido que, además, la caza en estas fincas traerá consigo repercusiones muy negativas en los ecosistemas y en las especies amenazadas de estas fincas, por cuanto las cacerías implican gran movimiento de vehículos y personas y no es de descartar que el OAPN prevea realizar nuevos caminos y tiraderos para facilitar el disparo fácil a los monteros.
Por estos motivos, Ecologistas en Acción exige al OAPN y al Ministerio de Medio Ambiente que anule la subasta y que retome una gestión de estos espacios acorde a las funciones de protección de la naturaleza que tienen encomendadas. Así lo trasladará a la próxima reunión del Consejo de la Red de Parques Nacionales y por carta dirigida al Ministro de Medio Ambiente.