La ciencia lo confirma: ver y oír aves es excelente para establecer una buena conexión con la naturaleza, fomentar la educación ambiental, ayudar a los jóvenes y niños a apreciar las virtudes de la flora y la fauna y contribuir a la conservación de las diferentes especies.
Gracias a la conexión con la naturaleza, observar aves permite formar vínculos con otras personas en base al amor por los animales y el ambiente. En este sentido, es bien conocido que las relaciones sociales y amistades son claves para disfrutar de una vida larga y saludable.
Además de ser una actividad estimulante que otorga paz y claridad mental, la observación por parte de aficionados que contribuyen a la ciencia ciudadana y actúan como voluntarios es una gran contribución para los científicos.
El ‘placer’ de observar a las aves
La península ibérica constituye un corredor migratorio para cientos de especies de aves: caminos aéreos de ida y vuelta que, junto con las islas Canarias y Baleares, hacen de España un lugar único que alberga algunos de los mejores lugares para observar en primavera.
SEO/BirdLife recuerda que las especies que se pueden observar dependen del lugar y de la época del año en el que se visite. Así, la primavera es una época fantástica para hacer turismo ornitológico porque coincide con el período de reproducción de muchas aves que se pueden ver en España.
Proposiciones de turismo ornitológico
Humedales costeros como el Parque Nacional de Doñana (Huelva) son una buena opción en estas fechas para disfrutar de las aves. Las lluvias de marzo han inundado las marismas, dando lugar a un paisaje casi olvidado, generando buenas expectativas para la reproducción de la avifauna acuática esta primavera.
También hay que destacar que el Delta del Ebro (Tarragona) o los Aigüamolls del Empordá (Girona) son en estos momentos una «explosión de aves». Es sin lugar a dudas un buen momento para observar aves acuáticas descansando y alimentándose en estos dos enclaves naturales en sus rutas migratorias, especialmente limícolas vestidos con sus coloridos plumajes nupciales en lugar de los más apagados pardos y grises invernales.
Además, muchas aves locales inician la temporada reproductora. Por otro lado, el extremo este de la Península recibe la visita de algunos migrantes que siguen rutas más orientales y que son por lo tanto mucho más raros en otros lugares. Anualmente se citan en los Aigüamolls especies muy atractivas como el bisbita gorgirrojo, la agachadiza real o el cernícalo patirrojo.
Los humedales del interior de España
Tal y como se dijo para los humedales costeros, es notable la migración de aves limícolas y otras acuáticas por los humedales interiores de La Mancha, además de iniciarse la reproducción de muchas especies que permanecerán meses en dichos lugares.
En el Parque Nacional de Monfragüe (Cáceres) disfrutaremos también de las aves rapaces y del monte mediterráneo. Salvo a primera hora de la mañana el calor será un factor limitante importante para disfrutar el pajareo en este parque nacional extremeño, pero mayo aun permite salir al campo sin grandes sufrimientos.
Cigüeñas negras, buitres negros y leonados, águilas imperiales, reales, calzadas y perdiceras, milanos negros y culebreras y otras grandes aves están en pleno trajín reproductor.
Avutardas y alondras ricotís las encontraremos en llanos y parameras castellanas. Aún podremos encontrar machos de avutardas realizando su llamativa exhibición en diferentes parajes castellanos, como en la zona de Villafáfila (Zamora).
Igualmente, la alondra ricotí, un auténtico fantasma del páramo muy fácil de escuchar pero más difícil de ver, canta en algunos espacios naturales de Soria o Segovia, que se suman a sus últimos reductos ibéricos.
A finales del mes de abril podemos reservar una visita para disfrutar de las aves de montaña en la Sierra de Gredos o los Picos de Europa donde las más atractivas son más tardías. Roqueros rojos, pechiazules, gorriones alpinos o el treparriscos, Ave del Año 2025, y otras inician una lista muy interesante de observaciones para los más pajareros.
La observación de aves tiene un código ético
La organización ecologista lleva más de dos décadas impulsando experiencias de turismo ornitológico responsable y de calidad. Ha desarrollado infinidad de materiales divulgativos, rutas, guías e itinerarios, además de proporcionar información sobre las aves y sus hábitats a la sociedad y a las instituciones.
Cuenta con su propio Código Ético para la Observación de Aves de la ONG que está destinado a toda persona que ejerce esta actividad, ya sea un turista o un observador local.
La ONG también ofrece a los viajeros un mapa con todo lo necesario para la observación de aves. Los espacios naturales perfectos para el birdwatching, las reservas ornitológicas y rutas donde observar.
Además, la organización ecologista cuenta con un equipo de guías de naturaleza y ornitológicos que se encargan de los viajes y excursiones. Son biólogos y ambientólogos especializados en turismo de naturaleza que conocen los valores del territorio y llevan a los viajeros a destinos eminentemente «pajareros». Las propuestas para esta primavera son Picos de Europa y el Parque Nacional de Doñana.


















