Adiós a tirar este material que era imposible de reciclar: consiguen darle una segunda vida y producen 50 millones de kilos

Publicado el: 9 de abril de 2024 a las 09:00
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En el mundo de la sostenibilidad no paramos de llevarnos sorpresas. Un material que antes parecía imposible de reciclar ahora está encontrando una segunda vida. La búsqueda constante del aprovechamiento nos está llevando a instancias increíbles, como el caso la tercera vida que el reciclaje ha abierto

Está teniendo lugar una auténtica revolución y, si permanecemos alertas a las últimas noticias y tendencias, podremos ser parte. 



El caso que vamos a explicar a continuación tiene que ver con el combate contra la contaminación plástica, uno de los grandes males que amenaza nuestro planeta.  

CARBIOS y De Smet Engineers & Contractors han establecido una alianza para construir su primera planta de Bioreciclaje de PET del mundo. Estará ubicada en Longlaville, Francia. Se trata de un proyecto innovador, que llega con el pronóstico de trabajar para 2025. Procesará 50.000 toneladas de residuos post-consumo de PET al año. 



Esta forma de reciclar está revolucionando el sector

Este proyecto brinda una solución a nivel industrial a la depolimerización enzimática de los desechos de PET y acelera la economía circular para plásticos y textiles. 

Por su parte, CARBIOS es un pionero en soluciones bioindustriales, mientras que De Smet Engineers & Contractors, líder global en ingeniería y construcción, supone un considerable progreso hacia un futuro sostenible en lo que concierne a plásticos y textiles. 

La asociación tiene su foco en la depolimerización enzimática y busca generar una nueva producción de procesos de reciclaje que no solo combaten la contaminación plástica. También ofrecen una materia prima alternativa a los monómeros de origen petrolero. 

“Nuestra asociación con De Smet Engineers & Contractors nos permitirá llevar nuestra tecnología de vanguardia al frente de la lucha global contra la contaminación plástica. Juntos, estamos creando una solución sostenible para los residuos de PET que ayudará a las industrias a cumplir con los requisitos regulatorios y cumplir sus compromisos de sostenibilidad”, aporta Jean-Claude Lumaret, CEO de CARBIOS

La construcción de la planta representa la creación de 150 puestos de trabajo directo e indirecto en la región. Proporciona así un necesario impulso económico, al mismo tiempo que contribuye al avance de la economía verde.  

Ya es posible reciclar este material: tiene una segunda vida y estás a punto de verlo

La estimación es que la planta comience su actividad en 2025 coincidiendo con la progresiva demanda de soluciones de embalaje sostenibles, llevando a Francia a ser líder en el esfuerzo global para batallar la contaminación plástica. 

CARBIOS dispone de tecnología patenta que hace posible la depolimeración enzimática de residuos de PET en sus monómeros originales, que luego pueden usarse para generar nuevos materiales de PET. 

Darle una segunda vida a este material es “fácil” con esta nueva manera de reciclar

Estamos ante un procedimiento revolucionario que permite la plena circularidad del PET, brindando una opción ambientalmente amigable a los métodos de reciclaje tradicionales que llegan en cuanto a reciclaje descendente o disposición en vertederos. 

“Estamos orgullosos de asociarnos con CARBIOS en este proyecto innovador. Su tecnología innovadora, combinada con nuestra experiencia en gestión de proyectos y ingeniería detallada, garantizará la ejecución exitosa de la construcción de la planta. Juntos, estamos abriendo el camino hacia un futuro más sostenible y circular para las industrias de plásticos y textiles”, señaló Alain Bernard, CEO de De Smet Engineers & Contractors

Mientras el mundo sigue lidiando con los perjuicios de la contaminación plástica, la colaboración entre CARBIOS y De Smet Engineers & Contractors otorga esperanza para enmendar la situación en un futuro no muy lejano. 

Esta manera de reciclar ya está revolucionando la industria tanto o más que el coche que despide al reciclaje convencional usando basura como combustible. Apostar por dar una segunda vida a los materiales suele traer buenos resultados, pero, por ahora, hay que esperar.