Telefónica sigue convencido de las ingentes oportunidades que brindará en un futuro próximo el llamado Internet de las cosas, es decir, la aparición de cada vez más objetos dotados de conectividad.
Por ello sigue trabajando en llevar al mercado proyectos basados en el uso de un pequeño dispositivo inteligente desarrollado por la propia operadora y conectado a la Red que, si se pulsa, desencadena la opción deseada como, por ejemplo, pedir una pizza. No en vano, Telepizza fue el primer cliente de la compañía que confió en este ‘botón inteligente’, como lo denominan en la compañía, para el que ahora la empresa de transporte urgente Seur y en la startup de movilidad urbana Cabify han encontrado nuevos usos.
Ambas compañías, al igual que lo hizo Telepizza en su momento con Click&Pizza, están inmersas en sendos proyectos piloto para, en el caso de Seur, agilizar las recogidas automáticas de paquetes en las empresas, y en el de Cabify, el envío de vehículos con chófer. El proyecto de Seur, llamado OneClick, arrancará en septiembre y, en función de sus resultados, se desplegará en toda España en 2016. “Incluso se valorará su despliegue en el resto del grupo”, según Juan Carlos Moro, director de Transformación y Tecnología de la compañía, quien no duda en afirmar que esto es “el inicio del Internet de las cosas en un sector tan físico como el del transporte urgente”.
La idea es utilizar el ‘botón inteligente’ desarrollado por Telefónica para agilizar la recogida de envíos en las empresas. El proceso es sencillo: el empleado de la empresa pulsa el botón y en Seur saben automáticamente que se trata de una recogida. La agilidad y la simpleza del proceso es abismal: no hace falta llamar, solo hacer un clic.
En el caso de Cabify el uso y objetivos del proyecto serán similares. “Nacimos porque queríamos mejorar la forma de pedir un coche con chófer. Por eso creamos la app. Ahora con el uso del botón inteligente, que lo usaremos con nuestros clientes de las empresas, buscamos impulsar aún más el ahorro de costes, la trazabilidad y la calidad del servicio -explica Juan de la Torre, director de Marketing y Ventas de Cabify-. Cuando el usuario (no solo de empresas de todo tipo sino también de hoteles para sus servicios de transfer, etc.) apriete el botón se generará un ticket y acudirá el vehículo más cercano. El usuario en todo momento sabrá los datos del conductor, algo esencial sobre todo en países con más riesgo como México, entre otros, donde nuestro servicio se usa mucho por motivos de seguridad”.
Será en Perú donde Cabify arrancará el piloto del botón inteligente. “Lo instalaremos en un taller de coches de alta gama que usará el botón para solicitarnos un coche cuando sus clientes tengan que dejar el suyo para reparar. Después de este piloto, ya en septiembre, extenderemos el uso del botón a empresas internacionales con las que trabajamos en otros países”, añade De la Torre.
Próximo paso: el botón multiuso para ‘gobernarlo todo’
Las posibilidades de uso del botón inteligente creado por Telefónica I+D son ingentes y han sorprendido al propio equipo de la tecnológica. “El concepto de Click& Pizza que desarrollamos con Telepizza es mucho mayor de lo que pensábamos -afirma David del Val, presidente de Telefónica I+D, en la presentación de los nuevos proyectos-, y da un juego tremendo, es aplicable a muchos otros sectores”.
Paco Jariego, director de Internet de las cosas Industrial en Telefónica I+D, ejemplifica con claridad el concepto que subyace en este proyecto: “Cuando un bebé llora el padre o la madre saben perfectamente por qué lo hace y cómo actuar para calmarlo. Nuestro botón hace lo mismo: es capaz de capturar el contexto en el que se encuentra el usuario y desencadenar la acción que demanda en cada momento”.
Más allá de proyectos específicos con empresas como los desarrollados para Telepizza, Seur o Cabify, que conllevan un trabajo de integración por detrás, el equipo de Telefónica I+D se está planteando el desarrollo de “un botón para gobernarlo todo”, como afirma Jariego utilizando la terminología de El Señor de los anillos. “Este botón podría tener varias funciones programadas, por ejemplo, pagar, notificar, etc. y simplificaría muchos procesos que no requieren inteligencia pero consumen mucho tiempo”. Jariego no se atreve, en cualquier caso, a asegurar una fecha de lanzamiento de este botón genérico: “De momento estamos en una fase de explorar oportunidades en el mercado”, añade.
La operadora tendrá que definir también cuál será el modelo de negocio que subyace tras esta tecnología, sobre todo de cara al ‘botón genérico’ del que habla Jariego. “Hemos creado un dispositivo que añade valor a nuestra conectividad. Ahora lo fabricamos nosotros pero podrá hacerlo cualquiera. Lo que buscamos es un ‘botón como servicio’ de forma que lo que venderemos será dicho servicio y cobraremos una tarifa mensual”. No obstante, el portavoz reconoce que está todo por definir. Incluso quién se quedará con los datos que genere el botón: “Lo normal es que las empresas quieran ser las dueñas de los datos pero también tiene cabida un modelo en el que, por un coste más económico, nos dejen los datos para poder explorarlos”, afirma Jariego, quien atisba también, como posibilidad, el lanzamiento de servicios de analítica asociados a los datos que genera el botón.
Las ‘tripas tecnológicas’ del botón inteligente de Telefónica I+D
La tecnología utilizada para construir el ‘botón inteligente’ es sencilla. “La mayor parte de la lógica se encuentra en un chipset donde se encuentra la conectividad, la SIM de Telefónica, etc.”, asegura Jariego, quien afirma que el dispositivo está basado en la plataforma de hardware libre Arduino porque “tiene la mayor base de desarrolladores en el mundo del Internet de las cosas y ha demostrado que puede ser integrado en una cadena de producción industrial”.
La tecnología móvil que emplea para la conectividad es 2G “por motivos de cobertura, penetración y coste”. La SIM está soldada en el dispositivo y lleva un plan de datos asociado. Dispone de una batería Li-Po integrada y tiene un API preparado para integrarse en aplicaciones de software, “lo que facilita acceder de forma sencilla a los datos”. Además de poder programarse a distancia, el botón tiene un coste inferior a los 10 euros. “Los negocios donde se va a aplicar, por ejemplo, el de la entrega de pizzas a domicilio, tienen márgenes bajos, así que el uso de este dispositivo tiene que ser rentable, no podía tener un coste muy elevado”, sentencia Jariego.
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