Eficiencia
Tecnologías verdes en el hogar. En un aparato pequeño cada vez cabe una mayor cantidad de información y el complemento para ello son los servicios de transmisión de medios, que evitan comprar DVD, libros, etc. Estas tecnologías verdes ayudan a reducir de manera drástica la demanda de producción de ciertos elementos y de sus embalajes. Y se ahorra en manufactura, recursos y transporte.
En cuanto a los electrodomésticos y los aparatos eléctricos y electrónicos, cada vez hay opciones más eficientes. Al tiempo que disminuye su tamaño, aumentan sus prestaciones y se dispara el nivel de eficiencia. Elegir los que ayuden a ahorrar energía es una excelente opción de vida.
Eliminar desperdicios
El desperdicio de alimentos es uno de los graves problemas de las nuevas generaciones de consumidores compulsivos. Las tecnologías están siendo muy útiles para realizar la trazabilidad de los productos. De esta manera se hace un seguimiento, desde el momento de la producción hasta el de su desecho. Los datos recopilados apuntan a que es posible ahorrar una tercera parte de lo que se tira en la actualidad.
Los nuevos digestores de biocombustibles aprovechan los restos de alimentos como nuevas fuentes de energía. También se emplean otros tipos de basuras para el mismo fin, de hecho, hace algunos años, en Suecia se preguntaban: ¿Cómo reciclar el 99% de los desechos?, y la respuesta fue: usándolos para conseguir energía.
Vida saludable
Las tecnologías verdes en el hogar están ayudando de muchas formas a que las personas tengan una vida más saludable y menos consumista. Hay aplicaciones para los móviles mediante las cuales se aprende a meditar. También a hacer ejercicios acordes con la edad y el estado físico o a consumir alimentos saludables. Y hasta enseñan a reparar cosas y a reutilizar muebles, para evitar tirarlas.
Cierto tipo de bombillas inteligentes tienen la capacidad de reducir o cambiar el gradiente y el color de la luz, con el fin de proteger la visión y de ayudar a que mejoren los patrones de sueño. También hay aplicaciones que controlan el uso de los aparatos electrónicos para evitar la exposición excesiva a los mismos, apagándolos a tiempo.
Las tecnologías aplicadas a la medicina están en continuo avance y la introducción de la inteligencia artificial y de otras innovaciones, logran que los diagnósticos sean más certeros con lo que la elección de los tratamientos es más eficaz y hay un índice de reconocimiento de patrones degenerativos mucho mayor, de forma que se consigue curar y dar una mayor calidad de vida a más personas.
Gracias estas nuevas tecnologías los médicos y los especialistas reciben una cantidad de información mucho más amplia y específica, que les permite dar una atención personalizada a sus pacientes. Esto implica un ahorro muy importante en recursos médicos, horas de trabajo de los profesionales, medicamentos y hasta en el tiempo que pierden los pacientes en recuperarse.