En BioCultura Madrid conocimos a los responsables de este proyecto, ejemplo de amor y respeto por la Naturaleza. Virginia y Miguel habían ido muchas veces a Taramundi. Les encantaba por su Naturaleza, su belleza, su paz… Hasta que un día, del año 2005, decidieron que no querían vivir sin esa paz. Y allí encontraron su particular Arcadia: un mundo ideal, donde lo primitivo pervive en armonía con lo moderno.
EL ALMA DEL BOSQUE
Se instalaron en Almallos (1) y no porque sí. La aldea, donde antiguamente había vivido una sola familia, se encuentra en la Reserva de la Biosfera (2) Oscos-Eo, Terras de Burón. Es una atalaya privilegiada que corona un collado montañoso, donde abundan los bosques de castaños, de laureles, los helechos, ¡40 tejos!…y donde los arándanos crecen de forma silvestre, ya que el terreno, por su acidez, es perfecto para ellos.
Así que, haciendo honor a sus convicciones de sostenibilidad, cuando se plantearon de qué vivir, no lo dudaron: frutos del bosque…”Buscábamos algo que no fuera contra-natura y que fuera ecológico, y además es saludable y una delikatessen”.
Han creado la única explotación ecológica de la zona, donde los arándanos son ¡de ración! Bueno, allí todo es grandioso: los acebos, los tejos milenarios, las hortensias azulísimas…Allí cultivan cinco variedades (Duke, Blueray, Brigitta, Herbert y Elliot), además de frambuesas, grosellas, moras y fresas. Obtienen 5.000 k/año que transforman (en su propio obrador-cocina), en mermeladas, salsas, helados y zumos; 100% naturales y riquísimos.
Almallos estaba abandonada. Miguel y Virginia le han devuelto la vida y esta vida, dicen, les ha recompensado con creces: “…Quien se va al campo no puede pensar sólo en cifras, debe valorar la calidad de vida, eso es muy gratificante”.
DEL BOSQUE A LA MESA
Pero vivir del campo requiere diversificación para obtener ingresos de distintas fuentes. Por eso, además de la producción de frutos del bosque y hortalizas, elaboran velas y jabones, organizan visitas guiadas y talleres, y regentan un espléndido restaurante.
Allí todo está pensado para despertar los sentidos naturalmente: el parking separado, para que puedas adentrarte en su particular paraíso poco a poco, a través del jardín; el riachuelo, los tejos a los que trataron con sumo respeto para no dañarlos…
El cuidado y el mimo se manifiestan en cada detalle: todos los productos que utilizan son ecológicos y/o de producción local. Hay acceso para minusválidos, menús para vegetarianos, celíacos y diabéticos. El responsable de estos fogones de sana belleza es Miguel, cocinero con muchas tablas, virtuoso y creativo.
Estar sentado en una de sus mesas es una experiencia epicúrea: la privilegiada situación nos regala vistas espectaculares del bosque atlántico; la exquisita decoración del lugar, y de los deliciosos y multicolores platos -en todos los cuales se utilizan frutos del bosque; los sutiles sabores; la cariñosa atención de Virginia… Todo conforma un hermoso conjunto, exquisito y delicado, que guarda un saludable equilibrio entre lo rural y lo novedoso.
Todo lo que allí han hecho se basa en un profundo respeto al medio. Por eso su proyecto está avalado por los valores RUNA (3) en experiencias ejemplares y han recibido el apoyo de Tríodos Bank.
Afirman que trabajar la tierra es duro, pero les gusta y viven en armonía con ella, porque “la tierra no pertenece al hombre, es el hombre el que pertenece a la tierra”.
Begoña Quintanilla
(1) Almallos: dotado de alma.
(2) Esta figura se aplica a los lugares con valores naturales a conservar, pero habitados, buscando el equilibrio sostenible entre el hombre y la tierra.
(3) Plataforma Convergencia Rural-Naturaleza (RUNA) http://www.ruralnaturaleza.com/runa/que-es-runa . Fundación Félix Rodríguez de la Fuente.
Para más info.:
Aldea de Agroturismo-Restaurante Los Arándanos
33775 Almallos. Taramundi. Asturias
www.losarandanos.com.
[email protected]
985 552 014 / 665 836 223
SALUDABLE ARÁNDANO
SALUD AZUL
Desde el punto de vista ecológico, es importante no sólo por sus frutos, sino porque protege el suelo de la erosión y contribuye a la formación de humus. Asturias es la segunda comunidad en su producción, después de Huelva. Sin embargo, la media de consumo en España es aún muy baja…pero hay que descubrirlo.
Estas son sólo algunas de sus bondades: gran valor nutricional por su contenido en ácido hipúrico; entre bajo y libre de grasas, sodio y colesterol; rico en fibra y vitamina C; refrescante, tónico, astringente y diurético; número uno por su capacidad antioxidante frente a todos los frutos y vegetales. El pigmento que le confiere el color azul al fruto (la antocianina) interviene en el metabolismo celular humano disminuyendo la acción de los radicales libres, asociados al envejecimiento, cáncer, enfermedades cardíacas, Alzheimer…
Así que pon arándanos en tu dieta, tu cuerpo te lo agradecerá.