El Parlamento de Andalucía ha aprobado recientemente la nueva Ley para el Impulso y la Promoción de la Producción Ecológica y de otras producciones agrarias, acuícolas y pesqueras certificadas en la comunidad autónoma.
Esta legislación tiene como principales objetivos consolidar el liderazgo Andalucía en el sector de la producción ecológica, fomentar, especialmente en el ámbito público (en dependencias que dependen de la Junta de Andalucía), el consumo de alimentos sostenibles y locales.
Uno de los mayores retos que tiene la producción ecológica en Andalucía es sin dudas el de aumentar el consumo, ya que en la actualidad es muy bajo y apenas representa un porcentaje mínimo (2.3%) del consumo total de alimentos en la CCAA.
Producción ecológica: la nueva ley andaluza impulsa un crecimiento sostenible y mayor consumo interno
El Parlamento andaluz ha aprobado este miércoles, con los votos de la mayoría del PP y la abstención de la izquierda, la ley de Impulso y Promoción de la Producción Ecológica y otras producciones agrarias, pesqueras y acuícolas certificadas, que busca contribuir a un desarrollo más sostenible y equilibrado mediante el impulso del crecimiento del consumo interno de estos alimentos para alinear la demanda con la oferta andaluza actual.
La normativa persigue fortalecer la posición de liderazgo que ostenta actualmente la región, ya que Andalucía es un referente en producción ecológica al contar con más de 21.500 operadores y alrededor de 1,5 millones de hectáreas en las que se aplica este modelo.
Esta es una superficie que supone el 50 % de la extensión ecológica de España, según ha explicado el consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco.
El consejero ha indicado que otra prueba de la apuesta andaluza por la certificación de la sostenibilidad es la implantación de sistemas de Producción Integrada, que suponen alrededor de 433.000 hectáreas y ronda los 45.000 productores en la región.
Compatibilidad entre modelos: ecológico, integrado y otras producciones sostenibles
Otros de los fines de la nueva ley es remarcar la compatibilidad y coexistencia de la producción ecológica con otros modelos sostenibles certificados ya existentes, entendiendo por producción certificada.
Como aquella que, amparada por la administración y evaluada por entidades externas de acuerdo con la Ley de Calidad Agroalimentaria, tiene acreditado el cumplimiento de reglamentos de prácticas sostenibles más exigentes que las normativas nacionales y europeas.
Entre las iniciativas que recoge la norma se encuentra la priorización de estos alimentos en los contratos que firmen las administraciones públicas ligados a servicios de hostelería, catering y restauración, y en esta medida se incluyen las contrataciones de suministro alimentario para centros educativos, de salud y sociosanitarios.
Fomentar la apuesta por la Producción Ecológica en la superficie agraria y forestal de la región e incluir actuaciones específicas para alimentos ecológicos en los planes de promoción de la producción agroalimentaria andaluza, son otros mandatos al Gobierno andaluz incluidos en la norma.
Incentivos, ayudas y un premio anual para impulsar la producción ecológica
La ley recoge la prioridad de solicitantes con producciones certificadas y apuesta por convocar subvenciones que respalden acciones promocionales de alimentos ecológicos en puntos de venta, y prevé la importancia de que el Gobierno andaluz fomente la promoción de los productos certificados en el canal Horeca (hostelería, restauración y catering) y su participación en ferias profesionales.
La creación del premio ‘Producción Ecológica de Andalucía’ para distinguir a personas o empresas por su actividad en el ámbito técnico, empresarial, industrial, comercial o investigador; y la apuesta por impulsar la venta directa de estos alimentos en explotaciones y mercados a través de la creación de una Red Andaluza de Municipios con Mercados Locales Ecológicos, son otras de las medidas recogidas.
Se prevé una bonificación del 50 % en la tasa de servicios facultativos veterinarios para las explotaciones ganaderas ecológicas, y se recoge un título específico dedicado a investigación, innovación, asesoramiento y transferencia de conocimiento, que también alude a la formación relativa a producciones certificadas.
La superficie de Producción Ecológica andaluza se ha incrementado un 50 % desde 2017 y a nivel general, destaca en primer lugar la superficie de pastos ecológicos andaluces, seguido en extensión por el olivar, que concentra el 9 % del total de las hectáreas de Producción Ecológica de Andalucía.
Además de los cereales, las leguminosas y los cultivos industriales, que juntos suponen el 7 %; y los frutos secos, que también concentran un 7 % de la superficie bajo este modelo.
Atendiendo a la extensión agrícola cultivada, la región alcanza las 475.000 hectáreas dedicadas, principalmente, al olivar (28 % de la superficie), los frutos secos (24 %) y los cultivos industriales y los cereales, incluido el arroz (21 %).
Críticas políticas: enmiendas rechazadas y debate sobre mezclar ecológico e integrado
La parlamentaria socialista Ana María Romero ha dicho que su grupo no ha tenido éxito porque el PP le ha rechazado más del 90 por ciento de las 47 enmiendas presentadas al texto que carece de «claridad, coherencia y ambición» cuando la comunidad andaluza ha sido siempre pionera al apostar por un modelo de sostenibilidad «real, no de etiqueta».
El parlamentario de Vox Alejandro Hernández justificó su oposición al texto en que supone la «sumisión» al Pacto Verde Europeo y con la estrategia «de la granja a la mesa», de forma que reproduce casi de manera literal los principios fijados por Bruselas sin evaluar su impacto real en la economía.
Por el grupo Adelante Andalucía, su portavoz adjunta Begoña Iza se ha quejado de que a su grupo no se le hayan aceptado las enmiendas y ha señalado que la ley aprovecha como «excusa» a la agricultura ecológica para incluir a la producción «integrada», con lo que se responde «de nuevo» a los intereses de los grandes productores.
Juan Antonio Delgado (Por Andalucía) ha indicado que el PP ha pasado «su rodillo» para no aceptar las enmiendas porque la «clave del engaño» de la norma es «mezclar» la producción ecológica con la integrada, con el objetivo de «favorecer a alguien» mediante una «vía rápida» para que ganen «los que buscan etiqueta sostenible».
La ley incluye medidas que apuntan a priorizar los alimentos ecológicos, sostenibles y de proximidad en los contratos y licitaciones de la administración pública, para proveer de productos ecológicos a hospitales, comedores escolares y otros centros dependientes directamente de la Junta de Andalucía.
La nueva Ley también establecen medidas orientadas a mejorar la cadena de valor, mediante el fomento de la transformación y la comercialización dentro de la región, de los productos ecológicos locales. Seguir leyendo en ECOticias / EFE














