Con el viaje bastante avanzado, Jordan se encontró con dos cachorros de perro abandonados y desorientados en mitad de una carretera rodeada prácticamente por desierto.
En la vida hay muchas opciones para elegir y no siempre se sabe cuál es la correcta.
Hace aproximadamente un año, Jordan Kahana, un director digital independiente, de 30 años, decidió aprovechar sus vacaciones de Navidad para realizar un viaje por carretera atravesando los Estados Unidos, desde Los Ángeles hasta Colorado en coche. Su idea era llegar hasta el Gran Cañón, en Arizona, pero algo inesperado cambió sus planes.
Con el viaje bastante avanzado, Jordan se encontró con dos cachorros de perro abandonados y desorientados en mitad de una carretera rodeada prácticamente por desierto.
Kahana no lo dudó. Cogió a los cachorros y los llevó directos a un hospital veterinariodonde los diagnosticaron con una deshidratación importante y le confirmaron que el lugar donde los encontró era «un punto caliente» de abandono de animales no deseados.
Los perros recibieron pronto el alta, tras haberles puesto todas las vacunas, y estaban listos para ser adoptados, pero Kahana no pudo. Había establecido un vínculo especial con esos perros y decidió adoptarlos.
Desde entonces y hasta ahora, Jordan Kahana ya no viaja sólo. Este tío inseparable de aventureros ha recorrido más de 50.000 kilómetros por carretera conociendo más de 35 estados.
A juzgar por las imágenes de Instagram, Zeus y Sedona, como se llaman ahora los perros, no pueden ser más felices.
Jordan tampoco parece disgustado con aquella primera decisión de haberse parado en mitad de una carretera y haberlos rescatado.