Celeste Saulo es responsable de la agencia meteorológica de la ONU y explica que todos los indicadores vinculados a la actividad productiva y el consumo de energía siguen en aumento, por lo que pide mantener viva la llama de la ambición para no caer en la inacción frente al calentamiento global.
A Celeste Saulo, secretaria general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) le sonó la “Alerta Roja” el pasado martes 19 de marzo en Ginebra, con motivo del lanzamiento del último informe sobre el Estado del clima mundial en 2023.
¿Es posible conseguir limitar el aumento de la temperatura como pretende el Acuerdo de París o es una ilusión?
No hablaría de una ilusión, hablaría de una ambición. Y esa ambición debe mantenerse para que el mundo realmente reaccione. Si uno no mantiene la ambición viva, corre el riesgo de no actuar. Y ese sería el peor de los escenarios. Consecuentemente, sí creo que sí, que tenemos que mantener la ambición en 1,5 y luego ver que resulta de nuestras acciones. Pero nunca bajar la ambición para paliar el cambio climático.
¿Cuáles son sus prioridades al frente de la Organización Meteorológica Mundial?
Lo que más me preocupa es que todos los indicadores vinculados a la actividad productiva y el consumo de energía, específicamente los gases de efecto invernadero, todos están aumentando, desde el dióxido de carbono, el metano, el óxido nitroso. El hecho de que estén todos aumentando quiere decir que las acciones que llevamos adelante son insuficientes para detener el calentamiento global. En ese sentido, para mí, desde la Organización Meteorológica Mundial, hay una acción concreta que estamos impulsando, que es una iniciativa para la medición operativa de los gases de efecto invernadero, y esto es para que tengamos datos concretos realmente de cómo está reaccionando el sistema físico a las distintas acciones que van tomando los países. Es imposible tomar caminos correctos si uno no mide cómo está reaccionando el planeta al cambio climático.
Esa es una de las acciones prioritarias y la otra acción prioritaria tiene que ver con una agenda más bien de adaptación, que es tener en funcionamiento sistemas de alerta temprana que son básicamente los sistemas que permiten a las poblaciones prepararse frente a un evento severo y de ese modo protegerse frente a un clima que ya está cambiando, que ya ha cambiado y que tiene más eventos extremos debidos al cambio climático que afectan las distintas poblaciones.
La importancia de la educación e información
Creo que todo cambio tiene que estar basado en la información y por esa razón el rol de la Organización Meteorológica Mundial es importante, porque provee la información acerca de cómo el planeta está reaccionando a nuestras prácticas.
Tanto en el consumo como en la producción, es imposible resolver la situación global si se trata de abordarla desde la situación individual. Creo que hay que concienciar a los distintos grupos económicos y sociales que todos ellos tienen un rol y que si no cumplen ese rol va a ser en perjuicio de sí mismos y del conjunto.
Pienso que, de ese modo, con información y educación y entendiendo, que si no lo hacemos entre todos no lo vamos a lograr, es la única manera que tenemos de convencer a grupos con distintos intereses que en realidad se van a perjudicar más si no actúan que si actúan.
¿Cuál es su mensaje a los jóvenes y activistas medioambientales?
El mensaje es que se involucren, que sean parte de esta búsqueda por un planeta más habitable. La realidad es que sin el involucramiento de los jóvenes es imposible pensar en un cambio efectivo.
Necesitamos todas las fuerzas posibles en juego: la decisión de los de los políticos, las juventudes con su mirada, porque van a ser los que tienen fundamentalmente el derecho a un planeta habitable, a un planeta que les ofrezca las mismas oportunidades que nos ofreció a nosotros. Y no hay manera de desarrollarse en un planeta si no pensamos el desarrollo y el cuidado del planeta al mismo tiempo. Pero no hay manera de cambiar las conductas actuales si no hay un gran involucramiento, sobre todo de los jóvenes.
Es usted la primera secretaria general mujer, pero también la primera que viene del sur…
Sí, un mensaje para la juventud y particularmente del sur global o de los países en desarrollo, es que creo que tenemos una función importante en este momento de aportar nuestro conocimiento, nuestra experiencia, nuestra manera de afrontar las situaciones y los problemas.
Creo que no es posible estar en la posición de demanda si uno no está en la posición de contribución y de aporte. Estoy completamente convencida que el mundo en desarrollo y el mundo menos desarrollado tiene enormes capacidades para poner en juego y enormes oportunidades para liderar un cambio.
¿Por qué no pensar que, desde el mundo que ha sido menos privilegiado hasta el momento, puede surgir la gran oportunidad?