La iniciativa permitirá a los promotores de proyectos trabajar en colaboración con los científicos y con el sector energético, de manera que se pueda acelerar la instalación de tecnologías limpias. La CE, que ofrecerá financiación para los estudios, pretende que el objetivo común de todos ellos sea la comercialización de estas tecnologías de aquí a 2020.
Para que todo el sector energético europeo se pueda beneficiar de los trabajos, anualmente se reunirá un foro consultivo formado por representantes de los Estados miembros, la Plataforma de Centrales Eléctricas, investigadores, ONG y organismos internacionales, que examinarán los avances realizados. La primera reunión ha tenido lugar este viernes bajo la presidencia de la CE.
«La captación y almacenamiento de CO2 es una tecnología esencial para reducir drásticamente las emisiones de dióxido de carbono procedentes del sector de la energía en las próximas décadas», ha declarado el comisario de Energía, Günther Oettinger.
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