Además, Roemer ha explicado que los gobiernos tienen que intervenir en los mercados «para propiciar un bienestar intergeneracional».
El experto ha indicado que el problema tiene un importante componente político porque, por un lado, «las industrias del carbón y del petróleo son reticentes a emprender esta transformación» y, por otro, auspiciadas por la propaganda del Partido Republicano de EE.UU., «las advertencias sobre el cambio climático se asocian a la izquierda» y «la opinión pública americana ve a los políticos que abogan por cambios como enemigos».
Para el profesor de la Universidad de Yale, «el progreso, en lo que se refiere al cambio climático, está en manos de EE.UU.», ya que «si no actúa, China no tendrá la presión de hacer nada efectivo».
«La UE está haciendo más que los EE.UU. y China está haciendo más que EE.UU., aunque China produce carbón, que es la forma de energía más contaminante. Si esto cambia, podremos asegurar a las siguientes generaciones un futuro de bienestar», ha agregado.
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