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sábado, septiembre 23, 2023

El agua, antídoto para luchar contra el cambio climático

Taller de Solidaridad, ONGD promovida por las Siervas de San José ha desarrollado durante un año el proyecto financiado por la cooperación española (AECID) denominado: “Adaptación al cambio climático de las familias campesinas de la cuenca alta del Mapacho, Ocongate, Cusco, Perú”.

Las familias campesinas, organizaciones, directivos comunales y autoridades locales han desarrollado estrategias de adaptación al Cambio Climático y han fortalecido sus capacidades de gestión ambiental incidiendo en las condiciones de vida de la población campesina.

Rafael Veiga, Coordinador de Taller de Solidaridad añade: En la línea de los objetivos de este año de situar el Día Mundial del Agua bajo la esfera de la cooperación, nos ha parecido muy pertinente presentar este proyecto que pone de manifiesto que la buena gestión y la cooperación entre los diferentes grupos de usuarios promueven el acceso al agua, la lucha contra su escasez y contribuyen a la reducción de la pobreza. La cooperación permite un uso más eficiente y sostenible de los recursos hídricos y se traduce en beneficios mutuos y mejores condiciones de vida.

Deglaciación de una montaña de 6.000 metros: aceleración del cambio climático
El cambio climático, producto del calentamiento global, se manifiesta básicamente en el acelerado proceso de deglaciación del Ausangate –uno de los mayores nevados de los Andes-, la disminución de agua en los manantiales y el desecamiento de los humedales, afectándose directamente el derecho de acceso al agua de las familias de la Cuenca del Alto Mapacho, uno de los principales derechos humanos, esencial para su producción y reproducción, es decir, para que produzcan sus alimentos (agua para riego) y para el consumo humano (agua potable). De otro lado, el gobierno local concentra sus esfuerzos en la construcción de infraestructura para riego y/o agua potable, que luego funcionan por debajo de su capacidad instalada, debido básicamente a la disminución del flujo de agua en los manantiales y riachuelos, afectándose las capacidades de producción agropecuaria de las familias, así como su salud por la insuficiencia de agua potable.

Esta situación se ve agudizada por la desaparición de la cobertura vegetal, tanto arbórea como de la pradera natural, producto de la tala indiscriminada de los pequeños bosques de especies nativas, así como del sobrepastoreo; propiciándose el escurrimiento superficial de las aguas de lluvia, reduciéndose la capacidad de infiltración de los suelos y con ello la posibilidad de recargar los acuíferos subterráneos, afectándose directamente y negativamente la oferta hídrica de la cuenca. Finalmente, la población desconoce el proceso del cambio climático; sólo ve los efectos que le afectan directamente.

Capacitación e información frente al desconocimiento
La población beneficiaria del programa la constituyen 110 familias de las comunidades campesinas asentadas en la cuenca alta del Mapacho (distrito de Ocongate, provincia de Quispicanchi).La cuenca alta del Mapacho es un territorio ubicado al sur oeste de la región del Cusco, donde se origina el río Mapacho (de los deshielos del nevado Ausangate). Los grupos beneficiarios son quechuahablantes y están asentados entre 3.700 y 4.100 m.s.n.m. Su principal actividad es la ganadería, especialmente la crianza de alpacas en la parte alta y vacuno en la parte media. Sin embargo, tienen serias limitaciones de acceso al agua, así como problemas de escasez de pastos debido al sobre pastoreo y, por tanto, desaparición de pastos naturales, indicador que refleja el deterioro del medio ambiente local, hecho que desconoce la población en su gran mayoría.

En un escenario de cambio climático como el que se vive, las familias no tienen mucho conocimiento de las causas, y por ende, de las consecuencias que conlleva este proceso, por lo que se requieren de capacidades para enfrentar esta situación. Las capacitaciones, además de las actividades informativas y de sensibilización, han sido oportunas a la hora de desarrollar estrategias de adaptación al cambio climático, realizando también acciones de reforestación, manejo y uso adecuado de recursos hídricos, educación ambiental, organización de faenas comunales, limpieza de ríos, etc. Todo ello ha permitido generar conciencia sobre el problema ambiental, que no solamente afecta a las poblaciones urbanas, sino también al sector rural.

Jesús García Consuegra, Responsable de Proyectos de Taller de Solidaridad añade: La permanente coordinación con el socio local e instituciones, ha permitido que el gobierno local implemente estrategias de adaptación al cambio climático, tales como la constitución de la Comisión Ambiental Municipal (CAM), quien ha reforestado los bosques con pinos, la organización de las Brigadas Ambientales Comunales (BACs), etc. Otros factores de éxito han sido el manejo del idioma quechua y el conocimiento de la zona por parte del equipo responsable de la implementación del proyecto.

García-Consuegra añade: Las capacitaciones en diferentes temáticas, han sido parte de las estrategias que más han ayudado como talleres, asistencia técnica, festivales, concursos, etc. Eso ha generado nuevas capacidades de adaptación al gran problema del cambio climático en la población campesina.

Impacto positivo en la zona: sembrando conciencia climática
García Consuegra añade: “Para los beneficiarios los temas de cambio climático y sus efectos, calentamiento global, medio ambiente, etc., son aún nuevos por la poca información que se maneja a nivel de las comunidades campesinas. Y tampoco existen instituciones que estén trabajando directamente estos temas en el ámbito de intervención del proyecto. Además la municipalidad de Ocongate recién ha implementado la Subgerencia de Desarrollo Ambiental y Servicios Municipales en julio y agosto de 2012, que tiene como objetivo la implementación de políticas y proyectos sobre medio ambiente.”

La implementación del proyecto ha generado mucha expectativa y participación de la población, así como del gobierno local, por lo que en algunas actividades se ha superado las metas previstas, siendo la actitud de los beneficiarios como comunidad, las autoridades, líderes y/o representantes, muy positiva. El liderazgo de los directivos comunales, de riego, forestación, etc., ha permitido la participación masiva de la población durante la implementación de las actividades del proyecto como las plantaciones forestales, desarrollo de eventos de difusión sobre cambio climático, la organización de faenas para la recogida de plásticos en los caminos y zonas de pastoreo de los animales, mejora de sistemas de riego y otros.

García Consuegra añade: Ahora bien, en este proceso de cambio climático se requiere continuar desarrollando acciones de información, sensibilización y capacitación para garantizar que la población asuma sus responsabilidades frente al medio ambiente en el proceso del cambio climático.

Desde el año 2001 Taller de Solidaridad ha invertido más de 3 millones y medio de euros en Perú, uno de los principales países beneficiarios de los proyectos de cooperación de Taller de Solidaridad y ha beneficiado a más de 200.000 personas, el 80% mujeres. Con más de 175 socios y 100 voluntarios, la ONGD trabaja en el área de cooperación, sensibilización, comercio justo y fomento del voluntariado.

http://www.canalsolidario.org/ECOticias.com

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