La encuesta “Patrones y percepciones ciudadanas sobre medio ambiente y condiciones para el cambio”, realizada por el Programa Estado de la Nación reveló que el 73% de las personas entrevistadas considera que la población no hace nada en concreto para resolver problemáticas de este tipo, aunque sí se preocupa por ellos, mientras que un 17% aseguró que la sociedad no está interesada en el tema.
Pese a que la mayoría de costarricenses considera que la protección del ambiente es uno de los grandes desafíos que enfrenta el país, en la vida cotidiana sus prácticas y hábitos no coinciden con esto.
La encuesta “Patrones y percepciones ciudadanas sobre medio ambiente y condiciones para el cambio”, realizada por el Programa Estado de la Nación reveló que el 73% de las personas entrevistadas considera que la población no hace nada en concreto para resolver problemáticas de este tipo, aunque sí se preocupa por ellos, mientras que un 17% aseguró que la sociedad no está interesada en el tema.
Otro de los hallazgos relevantes que arrojó la encuesta fue que un 70% indicó que sus familias reutilizan empaques, separan recipientes de vidrio, plástico y utilizan bombillos eficientes, sin embargo son muy pocos los que toman medidas para ahorrar agua y electricidad.
“Las personas entrevistadas es que la gente está interesada en el ambiente, pero no hace nada concreto para protegerlo; se siente en parte responsable, pero considera que la obligación recae en mayor medida en las autoridades, y cree que son estas, no la ciudadanía, quienes no están cumpliendo con su tarea”, indica el informe.
Además un 36% acepta que se puede permitir un poco de contaminación a las empresas que generan empleo, y para las personas consultadas, las principales causas del cambio climático son la deforestación (79%), la quema de combustible para el transporte o la industria (72%) y la acumulación de basura en rellenos o botaderos (69%).
Expertos de la Universidad de Costa Rica (UCR) y otras instancias, también ha reiterado en distintas ocasiones que el país no es sostenible, quienes insisten en que no se debe responsabilizar a la naturaleza del impacto de los desastres ya que, al momento de delimitar las razones que ocasionan el verdadero impacto se evidencia que las causas corresponden a un factor de intervención humana.
“Un país no puede decir que es sostenible si la inversión y la infraestructura que sustenta el desarrollo no está protegida ante las amenazas” asegura Raúl Salazar, jefe regional para las Américas de la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres.
Para Luis Zamora, coordinador del Programa de Desarrollo Urbano Sostenible (Produs-UCR), indicó que el país es deficiente en materia de planificación y gestión.