En la cuenca del Canal de Panamá, la especie invasora por excelencia en los alrededores de la vía interoceánica es conocida como “paja canalera” (Saccharum spontaneum), una especie de caña silvestre que se extiende por el norte de África, China e Indonesia.
Este arbusto que ha invadido más de 2.000 hectáreas de la cuenca hidrográfica del Canal, crece rápidamente, tolera el fuego y tiene un impacto directo en la reducción de la biodiversidad tropical de Panamá.
“La “paja canalera” tiene un gran poder agresivo porque crece centímetros por día. Comparado con las especies nativas, su desarrollo es más rápido
La semilla vuela con el viento y se disemina rápidamente, en camiones, carros, llantas…”, explicó a EFE, Arturo Cerezo, agrónomo del departamento de Ambiente, Agua y Energía de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
“He tratado de buscar evidencias escritas que sustenten la introducción de la especie en Panamá. Lo más fácil es decir, como afirma la vox pópuli panameña, que los “gringos” (estadounidenses) la introdujeron durante la construcción del Canal para controlar la erosión”, agregó.
Desde 1997 la ACP lleva a cabo proyectos de reforestación con especies nativas para acabar con esta especie invasora. Desde entonces, ya se han superado el millón de árboles plantados en el país para controlarla.
El Lirio Acuático
El lirio acuático (Eicornia crassipes) es una planta originaria del Amazonas que constituye una plaga en muchos países donde se hacen represas y sus raíces afectan a la navegación y al equipo de apoyo para el mantenimiento de las operaciones del Canal.
“Los primeros registros de extracción de lirio acuático fueron de 1910. Antes de abrir el Canal, cuando se comenzó a cerrar la represa para hacer el lago Gatún y embalsar el agua del Chagres, ya había problemas con la planta”, señaló el supervisor de la unidad de control de vegetación subacuática de la ACP, Juan Maturell.
El principal problema del lirio consiste en que “obstruye la luz”, explica Maturell, afectando así las especies nativas que necesitan que ésta penetre, y a la vez favorece el crecimiento de mosquitos.
Hidrilla
Por otra parte, la hydrilla (Hydrilla verticillata) es una planta que se encuentra en Asia, Europa, África y Australia y que fue introducida en los años 30. Aunque se desconoce cómo llegó al país, es igual de perjudicial que el lirio, porque sus raíces crecen desde el fondo hasta la superficie, afectando ciertas instalaciones del Canal.
El Sargento
Procedente del Amazonas, el pez sargento se introdujo en Panamá en 1967 para que la gente lo pescara dentro del lago artificial Alajuela. Pero en una temporada lluviosa, el pez fue a dar a un río afluente del Chagres, y por allí llegó al Lago Gatún, relata Maturell.
“El pez sargento es un depredador, se reproduce bastante y no había especie similar en el Lago Gatún. Las especies del lago son las que había en el río Chagres y el sargento es de los ríos grandes de Suramérica, que tienen características más similares a las de los lagos”, añadió.
Aunque inicialmente se dijo que acabó con siete especies nativas, “eso no fue realmente así”, explica Maturell. “Cuando entra una especie nueva se reproduce mucho y las otras especies se repliegan, pero, al cabo de un tiempo, la densidad de la especie introducida llega hasta un punto de sostenibilidad”.
Tilapia
La tilapia nilótica (Oreochromis niloticus), originaria de África, es un pez introducido por el MIDA en el año 1976 para la cría en estanques en las áreas rurales donde había problemas de desnutrición.
Aunque se introdujo una pequeña cantidad de tilapias en el Lago Gatún para carnada, se reprodujo muy rápido y se llegó a pescar con redes, pero no se tiene constancia del posible impacto ecológico que ha tenido en el ecosistema, según el especialista.
Más allá de invadir, estas especies conforman el paisaje del país a los ojos de panameños y visitantes desde la construcción del Canal.
PNUMA
