El Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales, MARENA, realizó recientemente una jornada de liberación de tortuguillas de la especie Paslama (Lepidochelys olivacea), como parte de la campaña nacional “Junt@s Conservamos Nuestras Tortugas Marinas”.
Estas liberaciones tienen como fin garantizar un mayor porcentaje de supervivencia de esta especie de tortugas marinas, puesto que las paslamas se encuentran en peligro de extinción y figuran como tales en la Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza).
Paslamas en libertad
Un total de 767 tortuguillos de paslama, una especie en peligro de extinción, fueron liberados de un refugio de vida silvestre en Nicaragua al océano Pacífico, informaron las autoridades. Las tortugas fueron liberadas del refugio de vida silvestre Río Escalante Chacocente, municipio nicaragüense de Santa Teresa, departamento de Carazo (suroeste), donde nacieron en un vivero, hacia las aguas del océano Pacífico, indicó el Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales (Marena) en una declaración.
La liberación de esos 767 tortuguillos, que forma parte de la campaña nacional ‘Juntos y juntas conservamos nuestras tortugas marinas‘, consiste en llevarlas de los refugios a la playa en donde son puestas en libertad en la arena a unos metros del mar.
El Marena destacó que sus guardas de áreas de conservación, junto con efectivos del Ejército de Nicaragua, fueron los encargados de liberar a los tortuguillos y son los mismos que están a cargo de proteger las arribadas de las tortugas marinas La actividad de desove de tortugas inició la noche del viernes 1 de agosto y concluyó el martes 5 de agosto, de acuerdo con la información.
El Marena indicó que entre los meses de julio y agosto han liberado 2.818 tortuguillos «como parte de sus esfuerzos para conservar la vida marina y garantizar el ciclo de reproducción de esta especie tan valiosa para nuestro país».
Río Escalante Chacocente, junto al refugio de vida silvestre La Flor, ubicado en el municipio de San Juan del Sur, departamento de Rivas, fronterizo con Costa Rica, también en el Pacífico, acogen anualmente miles de tortugas durante «temporada de arribadas», que se extiende de julio a enero.
Los refugios de vida silvestre Río Escalante Chacocente y La Flor son dos de los siete lugares en el mundo donde arriban esas especies de tortugas, entre otras especies de animales que se encuentran en peligro de extinción, según el Marena.
4000 tortugas paslama por noche
Cualquiera de estas playas puede recibir hasta 4000 tortugas en una sola noche, según los cálculos de la Dirección de Biodiversidad del Marena. La cartera de Ambiente y Recursos Naturales espera que en esta temporada arriben unas 120 000 tortugas y eclosionen 1,8 millones de crías en la costa del Pacífico.
Después de vivir unos 15 años en el océano, las tortugas regresan a anidar a la misma playa donde nacieron, probablemente en luna nueva o luna llena, de ahí que las arribadas masivas se pueden predecir, según las autoridades, que cada año emiten un calendario posible de estos fenómenos.
La comercialización de huevos de paslama está prohibida en Nicaragua por ser una especie en peligro de extinción. Sin embargo, y aunque es una situación lamentable, algunos mercados, establecimientos y vendedores ambulantes burlan esa medida.
El período de incubación de la Paslama es de 45 a 50 días, así que después de cada arribada que hacían estos galápagos, solía apreciarse en las playas la eclosión de hasta 100 000 huevos y los tantos millares de tortuguillos se movían enérgica y torpemente hacia el mar. Dado el peligro en el que está dicha especie y la inescrupulosidad de muchos, ahora se los salva y cuando nacen las tortugas se devuelven al mar para asegurarse de que sobrevivan. EFE