La intención del gobierno francés de construir parques eólicos marinos cuenta hoy con una fuerte resistencia en las poblaciones concernidas.
En principio se teme que este proyecto previsto para licitación internacional este mes, afecte el futuro de la pesca y el turismo de las zonas.
El ejecutivo pretende instalar 600 aerogeneradores por valor de unos 10 mil millones de euros.
Se tienen previstas una decena de zonas que se ubicarán en Normandía, Bretaña (norte) y las regiones de País de la Loira (oeste) y Languedoc Roussillon (sur).
La Compagnie du Vent, filial de Gaz de France (GDF) Suez, quiere desarrollar un parque eólico de 705 megavatios a unos 15 kilómetros de las costas de Tréport, comuna del norte del país situada en el departamento Sena Marítimo.
Este propósito concebido sobre una zona de 73 kilómetros cuadrados fue objeto de debate público en el cual se constató una gran oposición de los habitantes de la ciudad.
La producción de un 23 por ciento de energías renovables se encuentra dentro de los objetivos del gobierno francés en la Grenelle del Medio Ambiente.
Dentro de este plan tiene concebido la creación de seis mil megavatios de energía eólica marina.