Este es el objetivo con el que el vicepresidente y consejero de Industria del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga; el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz; el de Desarrollo Económico y Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo; el conseller d´Empresa i Treball de la Generalitat de Cataluña, Roger Torrent, y la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, han suscrito la carta de manifiesto pública de cooperación y respaldo de los respectivos gobiernos regionales.
Corredor del Hidrógeno del valle del Ebro
Aliaga ha asegurado que en el valle del Ebro la potencia de desarrollo de energías es «seria» y además cuenta con recursos solar y fotovoltaico, agua, gasoductos, electricidad proveniente de renovables, centros tecnológicos y universidades punteras y con esta cooperación el objetivo es convertirse en referente en descarbonización, movilidad, eficiencia energética, renovables, «no yendo uno por cada sitio», sino para «impulsar proyectos que interesen a las cuatro comunidades».
Desde Navarra, donde la industria representa el 30 % del PIB y junto con el transporte suponen el 72 % del consumo energético, y en un momento en el que «todas las semanas hay que cambiar los objetivos y las cifras», Mikel Irujo ha mostrado su optimismo para afrontar esta transformación, en la que «la cooperación, sí o sí, va a ser necesaria».
Conscientes «del reto y oportunidades y de la importancia decisiva» de este momento es por lo que desde Cataluña también se han comprometido a colaborar con el resto de autonomías para alcanzar los objetivos marcados, ha subrayado Roger Torrent, para quien este acuerdo plantea no solo una apuesta tecnológica y de sostenibilidad, sino «la autonomía estratégica del conjunto de Europa» y ofrece nuevas oportunidades de desarrollo económico, generación de empleo y captación de nuevas inversiones.
Por su parte, la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco ha reconocido que es un momento de «ilusión, pero de mucho trabajo», porque para poder utilizar esta tecnología de forma competitiva todavía queda camino largo por recorrer, aunque ha destacado que «haciéndolo conjuntamente se hará de manera más eficiente», si bien ha planteado la necesidad de incorporar a las regiones francesas de Nueva Aquitania y Occitania para poder «convertirse en referente europeo y que se nos considere lugar importante donde realizar inversiones».
Se trata, en conjunto, de que cada una de las autonomías aporte sus potencialidades, como es la alta demanda energética en regiones como el País Vasco, Navarra o Cataluña, más dependiente de la industria, o los recursos naturales de Aragón, para juntos impulsar proyectos con los que, como ha dicho Aliaga, «no se quede un euro europeo sin gastar».
Fuente: EFEverde