Una antigua mina de carbón en España ha sido reactivada para contribuir con la transición a la energía verde. Los términos “energías verdes” y “energías limpias” resuenan con fuerza en la actualidad frente a las tensiones geopolíticas actuales. Al hablar de ellas nos referimos a las fuentes de energía que no contemplan un mínimo impacto ambiental, especialmente en lo que tiene que ver con las emisiones de gases invernadero.
La implementación de estas energías es vital, ya que representan una alternativa sostenible frente a los combustibles fósiles, responsables de gran parte de la contaminación global. Son creadas a partir de fuentes naturales inagotables y se regeneran de manera constante. Su característica principal es que su proceso de generación y uso es compasivo con el medio ambiente, ya que no genera contaminación directa ni emisiones considerables de dióxido de carbono (CO2).
En el listado de fuentes de energía como ésta encontramos la luz solar, el viento, las mareas, las olas, la biomasa y calor geotérmico de la Tierra. Debido a la alta huella ambiental que presentan los combustibles fósiles, el mundo busca nuevas formas de abastecimiento más compasivas con el medio ambiente como estas. Así es como se ha llegado a reactivar una mina de carbón en España.
Una antigua mina de carbón es reactivada en España en busca de energía verde
La Confederación Hidrográfica del Cantábrico autoriza a Hunosa para el uso del agua de mina con el fin de generar hidrógeno verde en Langreo. Mine-to-H2 está basado en la reutilización de una antigua mina de carbón para la producción de hidrógeno verde a partir de energía renovable. Recientemente, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico hizo pública la autorización de Hunosa del uso del agua de mina para la creación de hidrógeno verde en el Pozo Fondón.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ya ha publicado en el BOE la concesión del aprovechamiento de aguas de la bocamina La Nalona, situada en el Fondón. Esto supone un avance en la planta planeada en Langreo y cuya creación queda contextualizada en el proyecto Mine-to-H2, cuyo propósito es contribuir a la descarbonización de sectores clave y fomentar la transición hacia un entorno y una economía más sostenible y compasiva con el medio ambiente.
Con este progreso, Hunosa ya cuenta con la autorización de la distribución para establecer la conexión para el abastecimiento eléctrico de la planta y actualmente se están tramitando las gestiones municipales. El proyecto Mine-to-H2 está centrado en la reutilización de una antigua mina de carbón para la creación de hidrógeno verde a partir de energía renovable.
La generación del hidrógeno se efectuará con el agua vertida por la antigua bocamina y energía eléctrica renovable producida de forma parcial por una planta fotovoltaica que será instalada en otro antiguo espacio minero. Una iniciativa enfocada en la economía circular y la movilidad sostenible en la zona central de Asturias.
Crearán energía verde gracias a una antigua mina de España
El proyecto ubica a Langreo en el ecosistema del hidrógeno renovable español y europeo. La segunda fase del District Heating Pozo Fondón fue inaugurada precisamente la semana pasada y ya está en funcionamiento con geotermia de agua de mina y combustión de biomasa, lo que ha hecho posible la extensión del servicio a otras 5 edificaciones, mejorando su eficiencia y disminuyendo la dependencia del bombeo.
La instalación permite la reducción de más de 1.300 toneladas de emisiones de CO2 al año y lleva a sus clientes a obtener unos ahorros garantizados en el sector energético de mínimo el 10% frente a los combustibles convencionales.
En definitiva, España mira hacia el futuro de la energía verde con la reactivación de una antigua mina de carbón. Si quieres conocer más sobre las energías renovables, aquí te dejamos 6 con un futuro promisorio. La última te impactará.