Frente a una ola de grandes problemáticas ambientales detonadas por emisiones masivas de gases contaminantes, El mercado europeo no solo ha optado por la utilización de un nuevo gas que no contamina y prometería una mayor eficiencia energética, sino que habría apostado todo por él.
Conoce todos los beneficios energéticos de este nuevo gas
Estamos hablando del biometano, el nuevo gas que estaría experimentando una transformación que podría llevar al sector energético un paso más adelante, más aún si tenemos en cuenta que es impulsado por una economía circular.
Debido a sus múltiples beneficios, este gas se ha convertido cada vez más en un negocio energético en pleno surgimiento, en especial si hablamos de algunos países de Europa que buscan una transición hacia fuentes de energías amigables con el medioambiente y efectivas a nivel energético.
Es importante destacar que la implementación del biometano no solo sería una gran opción si pensamos en todos los objetivos de descarbonización propuestos en la mayoría de los países europeos y especialmente en España. Incluso sería una alternativa sumamente atractiva para cortar con la dependencia a fuentes de energía del exterior.
En España se podría producir mucha más energía limpia de este tipo, suficiente para cubrir casi la mitad de la demanda de gas natural. Sin embargo , para hacer esto posible, se tendrían que construir al rededor de 2.326 plantas especiales en todo el país, lo que tendría un elevado costo, alrededor de 40.495 millones de euros.
Estas cifras mencionadas anteriormente representarían casi eel 3,6% de todo el dinero que España recauda en un un año (PIB). Además, crearía al rededor de 62.000 puestos de nuevos trabajos, tanto directos como indirectos, para operar y mantener estas plantas de biometano.
Este es el gran potencial que tiene el biometano en España
En España actualmente existen once plantas de biometano que están en funcionamiento. Las plantas en cuestión están ubicadas en Galicia, Madrid, Cataluña, León y Castilla, juntas tienen el potencial de producir 455 GWh de energía al año.
Incluso hay alrededor de 250 plantas de biogás en total, estas mismas producen al rededor de 8.079 GWh de energía al año. Sumando a la extensa lista, hay siete plantas que convierten biomasa sólida en gas, estas están distribuidas en varias regiones como Galicia, Andalucía, Aragón, Castilla, Murcia, León, y Castilla-La Mancha. Sin contar que, hay dos plantas piloto en León y Navarra que tienen el mismo objetivo.
Es importante mencionar que, en España hay alrededor de 200 proyectos en diferentes etapas, los mismos que están siendo llevados adelante por un número creciente de empresas. Estas empresas en cuestión se encuentran interesadas especialmente en gases renovables, lo que podría convertirse en un negocio de gran relevancia en el futuro.
Una lista de desafíos a enfrentar en esta transición energética
A pesar de que estos proyectos puedan sonar en extremo prometedores, la realidad es que enfrentan una serie de conflictos de regulación, económicos e incluso fiscales que estarían dificultando la proliferación de nuevas estructuras que produzcan este gas.
Por otro lado, otro de los grandes conflictos que se enfrentan es que, para que el biometano y otros gases renovables se utilicen de manera efectiva para reducir la huella de carbono, es crucial ganar el apoyo de la sociedad para estos proyectos. Esto implica involucrar a los agricultores para garantizar el suministro de materia prima, fomentar la demanda mediante incentivos como el uso de biometano en autobuses y demás.
El biometano emerge como una esperanzadora alternativa en el mercado energético europeo, prometiendo eficiencia y sostenibilidad, con su potencial para reducir la dependencia a fuentes de energía externas y cumplir con objetivos de descarbonización pero, ¿La sociedad podrá aceptar abiertamente esta propuesta?