El procedimiento administrativo recoge en un solo acto, denominado Autorización Ambiental Integrada, todas las autorizaciones ambientales existentes que tengan que ver con la producción y gestión de residuos, su emisión a la atmósfera, suelos, vertidos a las aguas, etc., así como todas las exigencias de carácter ambiental que hagan falta. Que aparentemente no es el caso de la planta de biometano de la localidad cántabra.
El órgano competente para otorgar la Autorización Ambiental Integrada, más conocida como AAI, es la comunidad autónoma correspondiente a la localidad en la que se ubique la instalación que la solicita. Dicha autoridad debe hacer pública la lista de autorizaciones otorgadas en su ámbito territorial.
AAI de la planta de biometano en Cantabria
Los ecologistas de Cantabria han presentado alegaciones al expediente de tramitación de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) de una planta de tratamiento de purines y otros residuos para su transformación en biometano y biofertilizante orgánico de la empresa Verdalia Bioenergy, S.L en el municipio de Hazas de Cesto (Cantabria).
De entrada mostrarán oposición a la instalación de la planta de tratamiento de purines, pero sí que han detectado algunas situaciones anómalas en la tramitación de la AAI de la planta, como son la necesidad de que se someta al procedimiento de Evaluación Ambiental simplificada y se emita una nueva Resolución de la Administración Regional donde se declare que el proyecto también es de interés social
La Ley 21/2013, de Evaluación Ambiental, recoge que entre los proyectos que han de estar sometidos a evaluación ambiental simplificada figuran las instalaciones destinadas a la valorización de residuos (incluyendo el almacenamiento fuera del lugar de producción) que no se desarrollen en el interior de una nave en polígono industrial.
El proyecto de Verdalia Bioenergy S.L. utiliza la misma documentación urbanística que tramitó en su día otra empresa, Biofertilizantes Green Gass. S.L. presentando una Resolución del Gobierno de Cantabria donde declaraba el interés social de la actividad de valorización de residuos en los mismos terrenos que el proyecto de Verdalia Bioenergy S.L.
A criterio de los ecologistas, el nuevo proyecto adolece de una falta de Resolución urbanística propia que establezca el interés social, en los mismos términos que la otorgada para el proyecto de Biofertilizantes Green Gass. S.L.
Por otro lado, entienden que, para el acopio de purines y su traslado a la planta de biometano no se deben utilizar las carreteras locales de los municipios de Ribamontán al Mar y Ribamontán al Monte para acceder a las instalaciones por el trasiego de vehículos e impactos ambientales derivados de su paso por localidades de escasa población. En su lugar se deben utilizar vías de media y alta capacidad, de forma idéntica a las que se utilizan para el traslado de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) a la planta contigua de tratamiento de Meruelo.