Europa se enfrenta a toda una serie de retos relacionados con el agua y con este motivo, diversas regiones españolas ya se han manifestado para pedir más inversión en infraestructuras hidráulicas y en afrontar la modernización en la gestión de sistemas, entre otras cuestiones.
Cuestiones, además de otras, que a juicio de estas administraciones regionales permitirán estar preparados para esos retos como son las sequías o cómo recuperarse en caso de inundaciones.
En este mismo sentido, las regiones europeas han instado a que la resiliencia hídrica, una de las prioridades del próximo mandato del Comité Europeo de las Regiones (CDR) 2025-2030, toque de cerca a las autoridades locales y regionales y se involucren en ello.
Resiliencia y soluciones modernas: la fórmula para sortear los retos del agua en Europa
Las regiones españolas pidieron este miércoles inversión en infraestructuras hidráulicas y modernización en la gestión de sistemas, entre otras cuestiones, para abordar los retos en Europa relacionados con el agua, como la adaptación a las sequías o la recuperación frente a inundaciones.
«Nuestra tierra ha vivido años de inundaciones, pero también de sequía. Debemos seguir avanzando en términos de gestión, digitalización, racionalización, calidad de acceso con infraestructuras que sean modernas para la gestión y la circularidad«, manifestó la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, durante debate sobre resiliencia hídrica en el pleno del Comité Europeo de las Regiones (CDR).
Añadió que el cambio climático es una realidad que afecta a la disponibilidad del agua y, por tanto, son necesarias estrategias como la modernización de regadíos o inversión en infraestructuras hidráulicas, algunas ya llevadas a cabo en la comunidad según aseguró.
Por su parte, la directora general de Cooperación con el Estado y la Unión Europea de la Comunidad Autónoma de Madrid, Cristina Menéndez, recordó que la comunidad vivió el pasado marzo «las lluvias más importantes de los últimos 135 años», una situación que no desencadenó «incidentes mayores» por el trabajo de los servicios de emergencias y la inversión en infraestructuras hidráulicas, entre otros.
En su intervención la vicepresidenta y Consejera de Presidencia, Economía y Justicia del Gobierno de Aragón, María del Mar Vaquero, reafirmó su «no» al trasvase del Ebro, un proyecto de transferencia de agua que desviaría parte del caudal del río a otras regiones que sufren escasez que despierta en España y en la comunidad un recurrente debate político.
«Queremos seguir reivindicando alternativas que sean sostenibles. Los trasvases, el trasvase del Ebro no es una solución aceptable, ni siquiera desde el punto de vista medioambiental. Es, además, muy costoso», expresó.
Por otro lado, la comisaria europea de Medio Ambiente, Resiliencia Hídrica y Economía Circular Competitiva, Jessika Roswall, recordó su reciente visita a Andalucía el pasado lunes, en la que se reunió con el presidente de la comunidad y vicepresidente del Comité Europeo de las Regiones (CDR), Juanma Moreno. El encuentro abordó asuntos como el agua, la economía circular o la política forestal.
«Hace poco visité Andalucía, una región española en la que la gestión sostenible de los recursos hídricos es un problema crucial. Eso me recordó el trabajo que tenemos por delante para reforzar esa resiliencia hídrica«, aclaró la comisaria europea.
Por su parte, las regiones europeas instaron a que la resiliencia hídrica, una de las prioridades del próximo mandato del Comité Europeo de las Regiones (CDR) 2025-2030, involucre a las autoridades locales y regionales.
En un comunicado conjunto, los líderes locales y regionales manifestaron su compromiso para abordar los retos relacionados con el agua en un contexto en el que, indicaron, la Unión Europea (UE) «sufre inundaciones primaverales de proporciones bíblicas, devastadoras sequías estivales, olas de calor, incendios forestales y potentes».
«Aprovechando su conocimiento de las condiciones locales, las autoridades locales y regionales pueden desarrollar estrategias específicas para garantizar la resiliencia de los sistemas hídricos, proteger los ecosistemas vitales y apoyar el bienestar a largo plazo de las comunidades«, añadieron.
Durante el debate, coincidieron en señalar la resiliencia hídrica como un elemento esencial para la sostenibilidad medioambiental y la competitividad de la UE. Por ello, afirmaron que debe estar integrada en ámbitos como la adaptación del clima, la seguridad alimentaria o la salud pública, entre otros. EFE / ECOticias.com