La unión de Gobierno, Junta y Ayuntamiento, una subvención de casi 54 millones o la modificación del uso del suelo son algunas de las bazas con las que cuenta Valladolid para que la empresa china Gotion High_Tech invierta 5.000 millones en montar una gigafactoría pionera en Europa que desarrolle la cadena completa de la producción de baterías.
Se trata de un proyecto impulsado por la empresa eslovaca Inobat, de la que la firma china es accionista, que se beneficiaría del tejido industrial vinculado a la automoción implantado en la capital vallisoletana desde mediados del siglo pasado -con fábricas como Renault, Michelín y otras empresas dedicadas a los componentes- y de las comunicaciones de la ciudad con el centro y el norte de España.
El objetivo de Gotion a través de Inobat, según las informaciones publicadas hasta ahora sobre el proyecto, es construir una gigafactoría que desarrolle la cadena completa del suministro de baterías para los coches eléctricos; que no sólo ensamble las partes, sino que produzca los ánodos y los cátodos que almacenan la energía, lo que garantizaría la construcción de las baterías sin importar aranceles ni vaivenes en los mercados internacionales.
Valladolid se prepara para acoger una gigafactoría de 5.000 millones de Gotion High-Tech
Los tres niveles de la administración se han volcado para facilitar que estas instalaciones lleguen a suelo vallisoletano: el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado por el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible y exalcalde de la ciudad, Óscar Puente, se reunieron el pasado 31 de octubre con el presidente mundial de Gotion High Tech, Li Zhen, y su equipo en el Palacio de la Moncloa para trasladarle su apoyo.
Previamente, el 8 de septiembre Sánchez anunció la adjudicación a la empresa Inobat de una subvención, enmarcada el PERTE VEC III, de 53,8 millones de euros y un préstamo de 456.000 euros para la puesta en marcha de una gran factoría de baterías en la capital del Pisuerga, que crearía 260 empleos directos y unos 500 indirectos.
En un comunicado posterior, el ministerio de Industria – que concede las ayudas – apuntó que la inversión prevista para esta fábrica alcanza los 712 millones de euros y señaló que la planta alcanzará una producción de 32 GWh en 2027, con pleno rendimiento previsto para 2029.
El proyecto viene de antes, ya que en el 2023 la responsable del área de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, viajó a Eslovaquia con el entonces alcalde de Valladolid Óscar Puente para reunirse con el consejero delegado de la empresa, Marian Bocek, y trasladar la idoneidad de la capital vallisoletana para la implantación de sus nuevas fábricas.
Una fábrica que impulsará la independencia energética europea
Desde la Junta de Castilla y León, han explicado que siguen pendientes de este proyecto y mantienen su intención de facilitar al máximo la implantación de la factoría en suelo vallisoletano, evidenciada en el protocolo que firmaron el presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco,y la directora de operaciones de Inobat, Tara Lindstedt, en octubre de 2022.
En el Ayuntamiento vallisoletano, también avanza la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) – que se encuentra en su segundo período de información pública – para implantar la empresa en el entorno de la Vereda de Palomares, con el objetivo de llegar a junio de 2026 «con todo en orden» y poner a disposición al menos 85 hectáreas de superficie para la instalación de la empresa, ampliable a otras 40.
El concejal de Vivienda y Urbanismo, José Ignacio Zarandona, ha incidido en que Li Zhen y su equipo aprovecharon su visita a España para conocer la potencial ubicación de estas instalaciones, donde comprobaron que tenían todos los suministros necesarios y que llegaron a plantear el uso de más suelo para la fábrica de cátodos.
Zarandona ha explicado que están a la espera de los siguientes pasos por parte de la empresa: decidir sus fases de implantación, designar su equipo de interlocutores técnicos, realizar la tramitación ambiental y obtener la licencia (que depende de la Junta), pero subraya que, «después de un tiempo de incertidumbre», el anunció de los 54 millones de euros ha abierto el camino para que la fábrica de baterías eléctricas se instale definitivamente en la ciudad.
«En Valladolid estamos encantados de recibirles, pero son ellos los que ahora tienen en su mano las decisiones para ponerse en marcha», ha concluido. Seguir leyendo en: ECOticias.com / EFE
















