Meses atrás, Elon Musk vio materializado uno de sus grandes sueños. Por fin, Tesla puso en marcha sus robotaxis en Austin, Texas. No fue un sueño cumplido al 100% porque no pudo desplegar su servicio autónomo y para todos los públicos. Comenzó con un servicio limitado, con personal de la compañía supervisando la tecnología, en áreas específicas y con invitados concretos.
Sin embargo, fue el inicio de lo que se auguraba como la gran proeza de Elon Musk. Esta tecnología llegó en un momento crucial para la firma, después de meses de mala reputación y una fuerte competencia por parte de sus rivales chinos. Comenzó con pocas unidades en acción, aunque Elon Musk confirmó a CNBC que la idea era que la compañía escala progresivamente.
Aunque la tecnología no estuvo exenta de polémica e inconvenientes, el magnate parecía tener claro hasta dónde quería llegar. Pero la última noticia sobre los robotaxis pone en jaque todos sus pronósticos. ¿El sueño de Elon Musk se acaba antes de empezar?
Los robotaxis de Tesla aún no pueden actuar como lo que son, robotaxis
Tras comunicarse que Estados Unidos podría darle la estocada final a Tesla, ha salido a la luz la difícil encrucijada en la que se encuentran los robotaxis de la compañía de Elon Musk. El establecimiento de los robotaxis de Tesla parece estar mucho más lejos de que pronosticaba Elon Musk.
Pese a las expectativas generadas, la autoridad reguladora de California ha aclarado que Tesla solo puede ofrecer servicios de transporte en la Bahía de San Francisco con conductores humanos al volante. Así lo ha informado en Reuters.
Este dato deja fuera a Tesla del segmento de taxis 100% autónomos en esta zona, al menos por ahora. La California Public Utilities Commission (CPUC) expuso que Tesla no cuenta con los permisos óptimos para trabajar con robotaxis. Tampoco ha comenzado el proceso para pedirlos.
Sumado a esto, toda propuesta de transporte público con coches de este tipo demanda múltiples licencias de la CPUC y del Departamento de Vehículos Motorizados de California (DMV).
Hasta ahora, Tesla solo reporta una autorización para probar sus sistemas de conducción autónoma con un conductor de seguridad a bordo. No obstante, no puede llevar pasajeros ni cobrar por el servicio si no tiene un conductor activo.
Tesla todavía no es competencia para Waymo en California
No es el caso de otras compañías como Waymo, la unidad de coches autónomos de Alphabet. En este caso, dispone de varios permisos y años de pruebas, con más de 13 millones de millas recorridas.
Al contrario, Tesla está en las fases iniciales respecto a la adquisición de licencia para trabajar con taxis sin conductor en California. Waymo necesitó casi una década hasta contar con todas las aprobaciones regulatorias.
Fue en 2023 cuando obtuvo la autorización para cobrar por los traslados en robotaxis completamente autónomos en puntos clave del estado. El servicio de Tesla en la Bahía de San Francisco estará bajo la modalidad “chauffeur”.
Esto quiere decir que siempre tendrá un humano al volante, sin la habilitación para operar de forma autónoma, ni siquiera con un conductor de seguridad monitorizando los sistemas automáticos.
Tesla tendrá que esperar para el despliegue de sus robotaxis en California
En las últimas semanas, Tesla ha llevado adelante un programa piloto limitado en Austin, Texas (como mencionamos en los primeros párrafos). Lo ha hecho recurriendo al uso de una docena de piezas Model Y equipadas con software de conducción autónoma.
Pasajeros seleccionados ya probaron los viajeros autónomos bajo la vigilancia de un monitor humano ubicado en el asiento delantero. Para el uso en California, la compañía conserva restricciones más severas y ni siquiera podrán circular coches semiautónomos.
Los robotaxis de Tesla aún deben demostrar hasta qué punto llega su tecnología para que se cumpla el máximo deseo de Elon Musk. Mientras ese momento llega, aseguran que a partir de ahora todos los coches de Tesla vendrán con un extra.