Tesla presenta problemas por su Cybertruck y su sistema de conducción autónoma. Una noticia que impacta tanto como la trama oculta de su batería de 250.000 km. A principios de diciembre, la compañía de Elon Musk notificó a los trabajadores de la fábrica de Austin, donde se ensambla el modelo Cybertruck, que podían tomarse tres días libres. Lo informaron a través de un memorándum al que el medio Business Insider hizo mención en uno de sus artículos. “El martes, miércoles y jueves de esta semana (del 3 al 5 de diciembre), no es necesario que se presente a trabajar”, advertía el memorando.
La falta al trabajo no comprendía una baja en el sueldo. Los trabajadores recibirán igualmente su pago por ocho horas de trabajo como si hubieran acudido a trabajar. El correo electrónico enviado a los empleados de Tesla matizaba que regresarían a la línea de producción del Cybertruck el pasado 6 de diciembre. Asimismo, la compañía señaló que algunos trabajadores no seguirían el horario estipulado, aunque estos serían notificados de manera individual. No quedó clara la razón por la que Tesla decidió cambiar temporalmente la programación de la línea de montaje.
Hay ciertas señales que demostrarían que la demanda del Cybertruck habría bajado. El fabricante de automóviles acortó los turnos para los trabajadores en su línea de producción en abril, según otro memorando visto por el medio ya nombrado. Varios titulares de reservas que llegaron tarde a reservar informaron que recibieron la entrega del vehículo, un indicio de que la firma puede estar revisando su lista antes de lo esperado. Después de que Tesla sacara a la luz el precio del vehículo el año pasado, varios titulares de reservas revelaron ante BI que no planeaban hacer su pedido.
Tesla se enfrenta a uno de sus peores momentos: la investigan por su conducción autónoma
La marca norteamericana vuelve a ser investigada por la Administración de Seguridad Vial norteamericana por su sistema de conducción autónoma. Además, la fecha de comercialización de esta revolucionaria tecnología en China ha sido retrasada. El pasado mes de octubre, Tesla comenzó una nueva era con la presentación del Tesla Robotaxi, el Tesla Robovan y el prototipo de robot autónomo Tesla Optimus. Sin embargo, la innovación no ha sido la única noticia vinculada a la compañía en los últimos meses.
Varios medios alertaron de que el Tesla Robotaxi se enfrentará a un fuerte problema, dado que el CEO de la firma pretende que se ponga a la venta antes de 2027. Antes de llegar a la calle, Elon Musk necesita conseguir los permisos necesarios para circular por Estados Unidos, un aspecto que podría ralentizar la meta difundida. Un propósito que, dados los reincidentes problemas de seguridad que registra el sistema de conducción autónoma de la marca, el ‘Full Self Driving’ (o FSD), parece difícil de alcanzar antes de 2027.
Sumado a esto, se dieron a conocer dos noticias que agravan los problemas de la firma estadounidense. La primera es que la Administración de Seguridad Vial de Estados Unidos, la NHTSA, tiene abierta una investigación federal contra la compañía. Según informa la agencia Europa Press, buscan “determinar si su sistema de conducción autónoma parcial es defectuoso”. La NHTSA ha abierto este expediente tras la aparición de 4 accidentes, uno de ellos con una persona fallecida, en los que estuvieron implicados vehículos de Tesla.
La agencia norteamericana expuso en un escrito que quiere estudiar el sistema propuesto por Tesla. Necesita saber si tiene la capacidad suficiente para “detectar y responder adecuadamente a los entornos de niebla y situaciones de baja visibilidad en la carretera”.
Tesla podría perder su credibilidad: investigan su sistema de conducción autónoma
Uno de los casos más renombrados de Tesla fue uno de los fallos en los limpiaparabrisas de los Tesla Cybertruck. La otra noticia que tiene a la firma en vilo es que China ha retrasado la venta de esta tecnología por problemas derivados con el reconocimiento de la cartografía y la seguridad de los datos.
No obstante, el principal problema del sistema FSD de Tesla es que, a pesar de su nombre, esta tecnología todavía no presenta la capacidad suficiente para conducir sin la intervención humana. Un escenario devastador que termina de impactar al mundo con lo último que ha pasado en China.