Zuzu es una pastor alemán de dos años de edad que vive en acogida en una protectora de animales de California, la Downey Animal Care Center. Allí se cruzó con Desi Lara, una voluntaria que lleva trabajando para esta protectora durante más de siete años y quien ha contado al mundo a través de su cuenta de Facebook la historia de esta perrita.
Zuzu llegó a la protectora porque una persona avisó a control de animales cuando la perra saltó la valla de sus amos para colarse en su jardín. Los chicos de control de animales pensaron que el mejor hogar que le podían dar por el momento era la Downey Animal Care Center,en la que trabaja Desi. Allí la dejaron en acogida. Un día, en una de las presentaciones caninas que hacen a quienes llegan a la perrera, Desi notó que Zuzu estaba más nerviosa de lo normal, y muy contenta. Curiosamente, la familia con la que vivía estaba allí.
Naturalmente, cuando Desi se dio cuenta de que era su familia, les preguntó si se la llevarían de nuevo a casa. Su sorpresa fue mayúscula cuando le respondieron que no. Los dueños le dijeron a Desi que Zuzu vivía en su casa con su padre biológico. Al morir este, Zuzu se puso muy triste y no dejaba de llorar. Como ellos no querían tener un perro triste, al ver que se había escapado decidieron abandonarla y dejarle en la protectora. Habían venido en busca de otro perro…
Desde luego, esta perrita no se merece una familia que no la quiera, así que sí, mejor que se quede con Desi. Por suerte, el próximo viernes será adoptada por una familia que sí quiere tenerla y que le dará una vida feliz.
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