Esta decisión supone promover la aplicación efectiva en la comunidad del Convenio Europeo del Paisaje, que apuesta por prestar atención a la calidad del mismo en todo el territorio, y no sólo en determinados espacios protegidos, y que establece tres grandes ejes de actuación: la protección, ordenación y la gestión del paisaje.
Hasta ahora, el Gobierno andaluz ha incluido este ámbito en algunas de sus políticas, especialmente en urbanismo y ordenación del territorio, carreteras, medio ambiente, patrimonio histórico y agricultura y desarrollo rural.
No obstante, con la nueva estrategia este trabajo va a mejorar su coordinación y a verse ampliado, ya que atenderá a aspectos hasta ahora menos abordados, como la ordenación de los bordes urbanos, la contaminación visual a lo largo de las carreteras o la degradación del paisaje rural. También atenderá nuevos retos, como la integración paisajística de las instalaciones de energías renovables o las repercusiones del cambio climático sobre el paisaje.
La Estrategia Andaluza significará además una aportación al proyecto de economía sostenible en la comunidad, porque el paisaje no sólo es un valioso patrimonio natural y cultural y un importante factor de identidad, sino también un recurso para el desarrollo económico capaz de contribuir a la creación de empleo. De hecho, su calidad es clave para el desarrollo turístico o para la localización de empresas en un determinado lugar, con lo que mejora la sostenibilidad y competitividad de diferentes áreas y ciudades.
La decisión de comenzar a elaborar la Estrategia Andaluza del Paisaje ha sido adoptada en la última Comisión Interdepartamental de Valoración Territorial y Urbanística, adscrita a la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio y que cuenta también con la participación de otros departamentos.
Competencias
En la Junta de Andalucía, además de Vivienda, son varias las consejerías con competencias sobre el paisaje: Medio Ambiente (incluyendo la Agencia Andaluza del Agua), Obras Públicas y Transportes, Agricultura y Pesca, Cultura (y su Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico), Turismo, Comercio y Deporte, Innovación, Ciencia y Empresa (con la Agencia Andaluza de la Energía) y Educación. Además, para su elaboración se contará con el asesoramiento científico del Centro de Estudios Paisaje y Territorio.
Esta comisión interdepartamental volverá a reunirse en enero de 2010 para dar los primeros pasos para la elaboración de la estrategia. En el caso de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio, algunos de los retos en esta materia pasan por reforzar la protección del paisaje en los planes subregionales de ordenación del territorio o por la creación de espacios públicos libres de interés supramunicipal, como los ya existentes de Los Toruños (Cádiz) y el Alamillo (Sevilla), o el previsto en la zona litoral del Arraijanal (Málaga).
Además, el enfoque de la calidad del paisaje se aplicará, gracias a la estrategia, a otros aspectos de la política andaluza como la declaración de espacios protegidos, la integración paisajística de las carreteras, la gestión de las fincas agrícolas y ganaderas o el cuidado de los entornos de los bienes y paisajes de interés cultural, A ellas se sumarán la consideración del paisaje como factor de diferenciación y calidad de la oferta turística, el diseño de nuevos espacios productivos con excelencia paisajística o la sensibilización sobre la importancia de la calidad del paisaje desde los centros educativos.
Para la elaboración de la Estrategia, el Gobierno andaluz contará además con el apoyo de la Red de Entes Locales y Regionales para la Implementación del Convenio Europeo del Paisaje (RECEP), que recientemente ha escogido a Sevilla como nueva sede de su Mesa de Coordinación Técnica.
Junta de Andalucía