Así, el informe ‘Situación de la gestión de los bosques tropicales 2011’ considera que entre 2005 y 2010 la superficie de bosques naturales tropicales bajo ordenación sostenible en África, Asia, el Pacífico, América Latina y el Caribe aumentó de 36 millones de hectáreas (89 millones de acres) a 53 millones de hectáreas (134 millones de acres), un área aproximadamente del tamaño de Tailandia.
Además, precisa que el área de bosques de producción de madera sujetos al menos a algún tipo de plan de gestión –un primer paso fundamental hacia el logro de la sostenibilidad– se ha incrementado en alrededor de un tercio desde 2005 y ahora asciende a 131 millones de hectáreas.
No obstante, el estudio también revela que más del 90 por ciento de los bosques tropicales mundiales sigue teniendo una mala gestión o carece de ella. Y, de cara al futuro, sugiere que el aumento de precios de los alimentos y los combustible, podría «entorpecer fácilmente» las iniciativas de conservación de los bosques.
El estudio se ha realizado con información de los 33 países que juntos controlan casi todas las selvas tropicales del mundo y la producción de maderas tropicales, según ha precisado la OIMT, un órgano intergubernamental encargado de promover la ordenación sostenible del uso y comercio de los recursos forestales tropicales.
Los países que han logrado «notables progresos» hacia la ordenación forestal sostenible en los últimos cinco años son Brasil, Gabón, Guyana, Malasia y Perú, según el informe. En general, por sus avances en las políticas relacionadas con los bosques, leyes y reglamentos, regímenes de tenencia «relativamente claros e instituciones fuertes», señala.
Por otra parte, indica que países como Camboya, Costa de Marfil, República Democrática del Congo, Guatemala, Liberia y Suriname «han sufrido grandes conflictos en las últimas décadas que han obstaculizado el desarrollo de las instituciones y las acciones locales necesarias para lograr una gestión sostenible de los bosques».
Finalmente, considera que en Nigeria y Papúa Nueva Guinea, la administración forestal «carece de recursos para supervisar adecuadamente el régimen de manejo forestal».
ECOticias.com – ep