El próximo sábado 14 de septiembre culminan las labores estivales de riego y mantenimiento de los árboles plantados en La Pedriza por la Asociación Reforesta. Esta ONG, declarada de utilidad pública, comenzó a restaurar la vegetación de La Pedriza en 2009, con la inestimable ayuda de cientos de personas, de empresas y con la colaboración de la Fundación Biodiversidad y de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, propietaria esta última de buena parte de los terrenos reforestados.
Desde el inicio de los trabajos, se han plantado más de 4.500 árboles en dos zonas de La Pedriza: El Tamboril y el Hueco del Paredón. Sin embargo, según Miguel Ángel Ortega, director de la ONG, “para crear un bosque, no basta con plantar árboles. Al contrario de lo que suele pensarse, las especies autóctonas también necesitan cuidados, especialmente durante los dos o tres primeros años tras la plantación”. Esta es la razón por la cual Reforesta realiza un programa anual de mantenimiento que, entre otras labores, incluye la reconstrucción de los alcorques (cavidades en torno al árbol para retener el agua de lluvia); la reposición de los protectores forestales caídos por el viento o por los animales y, sobretodo, el riego veraniego.
Por su parte, Rubén Bernal, técnico de la asociación, recuerda que “sacar adelante una reforestación en un terreno como el de la Pedriza es extremadamente difícil, ya que no hay posibilidad de acceso motorizado para portear los materiales ni para llevar agua y, además, en algunas zonas el suelo está muy castigado”.
Estas circunstancias exigen que los voluntarios carguen con azadas, protectores forestales y con muchos litros de agua que han de transportar cientos de metros. Una vez alcanzada la zona de plantación, es preciso internarse en el jaral para localizar los árboles plantados. Entre las jaras, los arbolillos están protegidos de las cabras monteses y disponen de un microclima más suave.
A pesar del esfuerzo que conllevan estos trabajos veraniegos, son muchos los voluntarios que se suman al reto de devolver a La Pedriza los bosques perdidos a lo largo de los siglos. Este verano, 152 personas se han inscrito en las seis jornadas organizadas por Reforesta. Además, gracias al apoyo prestado por las empresas Asitur, Thomil y Tradecorp, y por ciento veinticinco personas que quisieron regalar árboles a sus seres queridos, Reforesta ha podido contratar a un equipo de tres operarios durante diez jornadas, para encargarse del riego y mantenimiento de las plantas.
Dos de esas personas participaron en una actividad de formación e inserción laboral en el ámbito forestal de mujeres en riesgo de exclusión social, llevada a cabo por la ONG en 2012. Reforesta destaca también el apoyo de la compañía UPS, con cuya aportación pudo adquirir un vehículo para el transporte de los operarios y del material.
Según Miguel Ángel Ortega, “a partir de este otoño, Reforesta ampliará su compromiso con la mejora de nuestros bosques a otras zonas de la Comunidad de Madrid, como La Barranca de Navacerrada y el Valle de Navalmedio, y lo quiere hacer de la mano de tantos ciudadanos, instituciones y empresas que, cada vez más, apuestan por la recuperación de la espléndida naturaleza ibérica”.