Organizaciones ecologistas han mostrado su malestar y preocupación, ya que consideran que la partida presupuestaria del nuevo Marco Financiero Plurianual (MFP) deja a un lado la inversión en medio ambiente, acción climática y protección de la biodiversidad.
Es más, en este sentido, estos activistas consideran que, con esta reducción de la financiación para temas ambientales, se pone en peligro la continuidad del programa LIFE; el único fondo presupuestario que es específicamente ambiental dentro de la Unión Europea.
Ante esta realidad en un futuro no muy lejano, estas organizaciones ecologistas emplazan al Ejecutivo que preside Pedro Sánchez a que tome las riendas en favor de una respuesta rápida para que esa lucha contra la crisis ambiental no se quede sin fondos en Europa.
La protección del medio ambiente no recibe los fondos económicos esperados en la Europa post-2027
Ecologistas muestran su profunda preocupación ante la propuesta presentada ayer por la Comisión Europea para el Marco Financiero Plurianual (MFP) post-2027. Lejos de reforzar la respuesta europea ante la emergencia ecológica, el nuevo planteamiento presupuestario supone un paso atrás en la ambición climática y en la protección de la biodiversidad.
La propuesta apuesta por una simplificación extrema de los fondos de la UE, eliminando los objetivos específicos de gasto en biodiversidad y fusionando programas como LIFE en nuevos mecanismos orientados a la competitividad económica. De confirmarse este rumbo, la naturaleza perdería visibilidad.
Advierten que sin financiación adecuada no será posible implementar los objetivos europeos de restauración ecológica, ni afrontar con garantías los impactos del cambio climático, ni proteger los servicios ambientales que sostienen la salud, la seguridad alimentaria y el bienestar de la ciudadanía. «La propuesta de presupuesto presentada hoy por la Comisión Europea no está a la altura, ni da respuesta a los retos estructurales y globales que ponen en riesgo nuestro futuro común», reclaman.
«El cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación o la desigualdad social son crisis interconectadas que exigen visión a largo plazo y voluntad de transformación. Arrinconar a la naturaleza en el presupuesto europeo es no entender y no atender a la ciudadanía europea. Está en juego su salud, su seguridad y su prosperidad. No saldrán las cuentas sociales, sin contar con la naturaleza. Así, Europa es menos Europa», añaden.
Pérdida de peso político y financiero para la protección del medioambiente en la UE
A pesar de los compromisos asumidos por la UE en el marco del Pacto Verde Europeo, el nuevo MFP presentado hoy abandona el objetivo del 10 % de gasto en biodiversidad y no establece mecanismos de seguimiento ni rendición de cuentas para asegurar una financiación adecuada.
Además, el futuro del programa LIFE —el único fondo específicamente ambiental de la UE— queda en entredicho, ya que se propone integrarlo en un fondo de competitividad gestionado directamente por la Comisión. Esta decisión debilitaría su eficacia y alejaría a la sociedad civil del diseño e implementación de las políticas ambientales europeas.
El debilitamiento de la financiación ambiental se produce en un momento crítico para el medio ambiente en Europa. La propuesta de la Comisión contrasta con las necesidades reales y con las evidencias científicas que avalan la rentabilidad de invertir en restauración ecológica: por cada euro invertido, el retorno social puede llegar a multiplicarse entre 8 y 50 veces.
Ecologistas recuerdan que la eliminación de subsidios perjudiciales para el medio ambiente sigue siendo una tarea pendiente. Cada año, entre 34.000 y 48.000 millones de euros se destinan en Europa a prácticas que dañan la biodiversidad, especialmente en los sectores agrario y pesquero. Estos fondos deberían reorientarse hacia una transición ecológica justa que garantice medios de vida sostenibles.
En el Consejo de Patrimonio Natural y Biodiversidad celebrado este mismo año, las organizaciones de defensa ambiental solicitaron a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que España liderase una posición europea firme en defensa de la naturaleza. Esa necesidad es hoy más urgente que nunca para trabajar activamente en el Consejo y en el Parlamento Europeo y:
- Mantener el programa LIFE como un fondo específico y con mayor dotación.
- Establecer una asignación mínima para biodiversidad en el nuevo MFP.
- Garantizar indicadores de impacto y mecanismos de rendición de cuentas.
- Asegurar que los fondos europeos contribuyan a una transición ecológica justa y no perpetúen prácticas dañinas.
«Esta propuesta presupuestaria perjudica especialmente a países como España. Somos el país con mayor biodiversidad de la Unión, con el mayor riesgo de desertificación y erosión costera, una alta vulnerabilidad frente al cambio climático y con una proyección clara de reducción de las precipitaciones sobre unas masas de agua en muchos casos ya muy vulnerables. En estas circunstancias, renunciar a una financiación sólida y estable para proteger nuestro patrimonio natural es una amenaza directa a la calidad de vida de las personas y a sectores clave de nuestra economía, como la agricultura y el turismo. España necesita más, no menos, apoyo europeo para afrontar estos desafíos», sentenciaron. ECOticias.com