De este modo, Martínez-Cañavate ha remarcado que este dato, que corrobora la línea mantenida durante la última década en la que el cumplimiento de los objetivos siempre ha superado el 90 por ciento, cobra «mayor relevancia si se tiene en cuenta que 2010 fue un año de especial complejidad como consecuencia de la finalización y puesta en marcha de la planta de ampliación de la capacidad de producción (ACPDM) y Cogeneración 2».
Las inversiones ambientales se elevaron a 36 millones de euros, que sitúan en 250 millones la inversión acumulada desde 1997. Las principales partidas se destinaron a proyectos relacionados con la aplicación de las mejores tecnologías disponibles en la ACPDM, destacando los 16 millones empleados en instalaciones para la reducción de emisiones atmosféricas.
Los costes de gestión y mantenimiento de las infraestructuras ambientales fueron de 16,4 millones. Desde 1997 la cifra destinada a costes ambientales ha sido de 138 millones.
PRINCIPALES RESULTADOS
El comportamiento del complejo en 2010 fue, ambientalmente, «muy positivo», con evoluciones favorables en todos los parámetros, ya que las emisiones a la atmósfera.
Las emisiones atmosféricas fueron notablemente inferiores a los límites que fija la Autorización Ambiental Integrada (AAI) con importantes reducciones sobre las de 2009. En lo que respecta a las emisiones globales (efecto burbuja), los valores oscilan entre el 22 por ciento y el 36 por ciento de los límites permitidos. En la comparación con el año anterior se obtienen reducciones del 42 por ciento en dióxido de azufre (SO2), 24 por ciento en los óxidos de nitrógeno (NOx) y del 31 por ciento en partículas.
El apartado de emisiones totales de SO2 en función de la cantidad de crudo procesado, Martínez-Cañavete ha remarcado que «continúa con la tendencia a la baja» de los últimos años, alcanzándose en 2010 un «nuevo mínimo histórico». En la evolución durante la última década (2000-2010) la reducción ha sido del 78 por ciento. Esto ha sido posible, básicamente, por la reducción de consumo de fueloil en favor de combustibles gaseosos con menor contenido de azufre e, indudablemente, a la puesta en marcha de ACPDM.
En el 2010, las emisiones de CO2 no superaron los derechos de emisión asignados. Concretamente, el conjunto de la factoría de Palos de la Frontera (Refinería y Gepesa) emitió 804.461 toneladas menos de CO2 que las que le correspondía por los derechos anuales.
EFLUENTES LÍQUIDOS
El volumen de efluentes en el principal punto de vertido de la Refinería aumentó un 54 por ciento respecto a 2009 debido al incremento de agua captada que ha supuesto la puesta en marcha de la ACPDM y Cogeneración 2. Aun así, fue un 14 por ciento inferior al volumen máximo autorizado.
En cuanto a la calidad del vertido, experimentó mejoras respecto a 2009, lográndose en todos los parámetros concentraciones inferiores a los límites que establece la AAI, destacando un 54 por ciento del valor límite de emisión en los sólidos en suspensión y un 20 por ciento en amoníaco.
La trayectoria de mejora de la calidad global de los vertidos presenta un resultado similar al de las emisiones, de modo que la presencia de los diferentes parámetros ha disminuido un 79 por ciento desde 1995.
La cantidad de residuos gestionados en 2010 descendió ligeramente en relación al año anterior. Se contabilizaron 3.094 toneladas de residuos peligrosos, frente a las 3.133 de 2009. En cuanto a los residuos no peligrosos se generaron 1.488 toneladas, cien menos que el año pasado. En este sentido, en el ejercicio 2010 se reciclaron 1.278 toneladas de residuos.
Desde 2006 se viene determinando el índice de eficiencia energética de la Refinería, en base a una serie de parámetros relacionados con la gestión y uso de los recursos energéticos. La mejora del índice ha sido «constante». En 2010 la media ha sido de 101,2, nueve puntos mejor que en 2009 y dieciocho en relación a 2008.
ACTUACIONES SOBRE LOS PRODUCTOS
El 1 de enero de 2009 entraron en vigor las nuevas especificaciones de contenido de azufre de gasóleo y gasolina de automoción que aplican «una importante reducción», pasando en las gasolinas de 0,005 por ciento(50 ppm) a 0,001 por ciento (10 ppm). La Refinería ‘La Rábida’ se adelantó produciendo ya en 2008 el diez por ciento de las gasolinas y el 20 por ciento de los gasóleos con estas especificaciones.
Por otra parte, la planta de ETBE, –componente para la fabricación de biocombustibles obtenido a partir de etanol de origen agrícola–, que opera desde 2004, ha supuesto el 13,61 por ciento de la producción de gasolina durante 2010.
En 2009 empezó a operar la Planta de Biodiésel que la compañía BioOils Energy ha construido en los terrenos de la Refinería. La utilización de biodiesel en 2010 ha supuesto el 5,45 por ciento de la producción de gasóleos de automoción.
INCIDENCIA DE LOS NUEVOS PROYECTOS
En 2010 se han puesto en marcha la ampliación de la capacidad de producción (ACPDM) y la planta de Cogeneración 2 y además la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía amplió la Autorización Ambiental Integrada de Refinería ‘La Rábida’. Desde el punto de vista ambiental, los proyectos de ACPDM y Cogeneración 2 han tenido una incidencia «positiva» en el medio atmosférico, al permitir mejorar el balance energético del complejo reduciendo sensiblemente los niveles de emisión.
Se trata, como ha explicado el director de la Refinería La Rábida de «emplear menos energía para producir» y en este sentido ha destacado que en 2010 se ha producido un descenso del 20 por ciento de consumo de energía por tonelada de crudo. La refinería, con una capacidad de producción total de 9,5 millones de toneladas, ha producido en 2010 unas 7,5 y de cara a este año se espera que la producción global ronde las ocho u 8,5 millones de toneladas, aunque «todo dependerá del mercado», donde en estos momentos «la demanda es decreciente».
EFECTOS DE LA CRISIS
De otro lado, sobre los efectos de la actual coyuntura económica, Martínez-Cañavate ha explicado que en los dos últimos años se ha reducido entre un cinco y seis por ciento el consumo de crudo, que además se ha visto afectado por la eficiencia de los vehículos, ya que como ha ejemplificado «un coche ahora consume un 30 por ciento menos que uno de hace cinco años».
ACCIDENTE EN LA REFINERÍA
Por su parte, preguntado por la investigación de las causas del accidente, que tuvo lugar el pasado mes de agosto y en el que perdieron la vida dos personas, Martínez-Cañavate ha explicado que desde el momento del suceso Cepsa se puso a disposición de las administraciones y de la Fiscalía para facilitar toda la información correspondiente. Ha precisado que el accidente «fue provocado por una fuga de productos junto a la planta de efluentes», a la par que ha recordado que el tema se encuentra aún en la Fiscalía, por lo que una vez que las autoridades competentes definan las causas, entonces desde Cepsa se explicarán «diafanamente».
Cepsa es la primera empresa andaluza en facturación con 13.300 millones de euros y en concreto en La Rábida se crearon en 2010 920 empleos directos, y 1.284 puestos de trabajo indirectos, lo que supone que el empleo inducido «se puede multiplicar por tres».
ECOticias.com – ep