Asia es uno de los continentes más comprometidos con la misión de salvar el planeta. Un título no menor teniendo en cuenta lo que está pasando en otras ubicaciones. El avance global hacia una energía segura, equitativa y sostenible está acelerándose después de años lentos, con el mayor ritmo registrado desde antes de la pandemia. Así lo dejó constatado el Índice de Transición Energética 2025 del Foro Económico Mundial.
Reportó un incremento interanual del 1,1%. Se trata del dato más rápido desde antes de los índices de la pandemia. El 65% de los países del mundo mejoran mientras que el 28% avanza en los campos esenciales: seguridad, sostenibilidad y equidad.
El Foro Económico Mundial advirtió que, aunque los dos billones de dólares en inversiones en energía limpia en 2024, las emisiones registraron el récord de 37 800 millones de toneladas. Este dato llegó en el año más caluroso. Denominado así por una subida del 2,2% en la demanda de energía fomentada por el uso de IA, centros de datos, refrigeración y electrificación.
Asia encuentra la forma de aminorar la contaminación
En este contexto, un país de Asia parece haber hallado la forma de salvar el planeta de la contaminación. Mientras en Ciudad Real se advierte de la necesidad urgente de ampliar el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, China ha creado el mayor sistema de parques nacionales.
Busca tener 49 reservas y 110 millones de hectáreas para 2035. En menos de veinte años, China busca triplicar el tamaño del sistema de parques nacionales de Estados Unidos. El plan es registrar 49 parques nacionales para 2035.
Estos espacios implicarán la ocupación de más de 110 millones de hectáreas. El país de Asia está dispuesto a encabezar la conservación ambiental a nivel global. Esto a pesar de haber iniciado su primer parque en 2021.
En la actualidad, China ya cuenta con cinco parques nacionales abiertos, que se extienden por 23 millones de hectáreas. Los espacios mencionados implican desde glaciares remotos hasta selvas tropicales.
Con el manto de Asia, estas zonas brindan protección a especies únicas como el panda gigante y el tigre siberiano. Además, pretenden incorporar a las comunidades locales en su administración.
Modelo que sigue este país de Asia para conservar su naturaleza
El país de Asia ha tomado sobre sí una perspectiva moderna y rigurosa para su modelo de conservación. Se encuentra alineada con los estándares de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Abarca zonas de protección estricta (en las que no pueden existir viviendas o explotación comercial), turismo ecológico regulado, restauración de hábitats, monitoreo científico e impulso de la relación entre naturaleza y cultura.
El resultado de que China se haya adherido a este modelo ha sido el incremento en la población de 200 especies animales extrañas, además de cerca de 100 especies vegetales en peligro de extinción. Esto solo en los primeros cuatro años del sistema.
¿Por qué son tan importantes los parques nacionales?
Los parques nacionales tienen un importante valor ecológico, pero también albergan otras ventajas dignas de mención. Su existencia protege aldeas tradicionales, templos y rutas históricas.
También fomentan las economías rurales a través de la práctica del ecoturismo, ofrecen instrucción a la población sobre sostenibilidad y patrimonio cultural y generan empleos verdes.
Este último punto es especialmente importante en el caso de aquellos que sienten arraigo por donde nacieron. Al existir una demanda laboral mayor, se reduce la necesidad de migrar a las ciudades.
La magnitud y ambición mostrada por este país de Asia colocan a su sistema como uno de los proyectos ambientales más relevantes del siglo XXI. En paralelo, la biodiversidad del Parque Nacional de los Picos de Europa es monitorizada y analizada.